Redacción AnalisisUrbano.com
En recientes investigaciones, Análisis Urbano pudo establecer que Las Convivir que operan en el centro se vieron obligadas a cambiar su modo de operar. Las constantes denuncias y mapeo criminal que realizó este medio y que tuvieron eco en otros medios de comunicación regionales y de carácter nacional, hicieron que alias Barny, quien continúa delinquiendo desde la cárcel, diera la orden de retirar a gran parte de sus hombres de la zona céntrica de la ciudad, a fin de bajar el perfil criminal de este grupo.
No obstante, la extorsión de quienes pagan la “vacuna” no cesó, por el contrario, se tecnificó el negocio ilegal al punto que los criminales sólo pasan una vez al mes para verificar el pago, por concepto de vigilancia, de cada negocio.
Quienes padecen la extorsión, ahora se ven obligados a consignar un monto mensual a una cuenta bancaria que figura a nombre de una promotora de servicios y principalmente de una asociación de seguridad, asociación que sirve como fachada para el delito y que tendría relación cercana con una que funciona y fue creada hace poco en Manrique, cerca de la 45. Ahora, los criminales ya no pasan recogiendo dinero sino que una vez al mes, pasan por los almacenes o puntos de ventas informales y exigen los recibos bancarios que darían fe del pago de la vacuna.
De manera que se estaría hablando de una extorsión mucho más tecnificada y que ya había tenido sus inicios a través de las casas de cobro. Empresas de extorsión que el pasado mes de mayo fueron denunciadas y mapeadas por Análisis Urbano en dos informes: Las nuevas casas de cobro de Las Convivir y Las Convivir tienen 11 casas de cobro en Medellín.
Aunque este nuevo operar de Las Convivir es ordenado por alias Barny, en la práctica, quien está al frente de todo es alias Cejas, actual jefe máximo de este grupo paramafioso. Cejas coordina todo desde el barrio Campo Valdés, territorio en el que se mantiene y en el que se hace visible movilizándose en un vehículo mazda 3, y su mano derecha en el crimen es alias John Camellete, que es quien baja al centro Medellín para dirigir la verificación y el pago de la extorsión.
A raíz de la captura de alias Barriga, las once casas de cobro fueron fusionadas y sólo opera una que estaría controlada por Cejas y Camellete, y sería básicamente el lugar donde se lleva la contabilidad criminal. Allí, alias Lina, quien sería la secretaria o asistente personal de Cejas, recauda los recibos bancarios y hace el control y el registro de quienes han pagado la vacuna a nombre de la Asociación de seguridad. Al parecer, Cejas, a través de un abogado, está gestionando un permiso con la Superintendencia para poder funcionar como empresa o cooperativa de Seguridad.
Con este nuevo operar, Las Convivir ya no son tan visibles en el centro de la ciudad, ahora sólo tienen a un coordinador por zona y generalmente son personas que se movilizan en moto.
Según las denuncias recogidas por Análisis Urbano, ahora, para prestar la seguridad, los coordinadores de zona dejan un número telefónico al comerciante, una serie de códigos y un teléfono Avantel, y le advierten que sólo se comunique si tiene problemas al interior del negocio. De ser así, para resolver el inconveniente “envían al local a los muchachos de los barrios más cercanos, serían los de Manrique, Caicedo o Campo Valdés”. Paradójicamente, y según los denunciantes, la disminución de la presencia de Las Convivir, ha hecho que el hurto, el “raponazo” aumente en las calles del centro: “pasaron de ser constantes por la zonas a solo pasar una vez al mes, ahora roban más”.
Los coordinadores de Las Convivir
Después de la guerra de Las Convivir, de las capturas de alias Diadema y de alias Barrigas, esta estructura paramilitar y mafiosa se ha restructurado nuevamente y ha dado todo el poder a alias Cejas, poder que se ha fortalecido gracias a que desde la cárcel se dio la orden de acabar o matar a la gente de Diadema y de alias Carnero porque estos sujetos no quieren acogerse al nuevo sistema de trabajo. La nueva estructura de Las Convivir quedó así:
Su jefe máximo es Cejas, quien poco sale de Campo Valdés y su hombre de confianza, y encargado de las operaciones, es John Camellete. Este último tiene dos lugares de operaciones uno ubicado en el Centro Comercial Ópera y el otro en el Centro Comercial Maracaibo Número 2. Sitios donde se reúne con el resto de coordinadores de zona.
Hasta donde Análisis Urbano pudo establecer, los coordinadores de zona se dividirían de la siguiente manera:
-Alias el Rolo, quien anda con dos escoltas y se mantienen en la zona de billares El Rubi un billar, controlaría entre la calle Cundinamarca, la avenida De Greiff, carrera Carabobo hasta la paz.
-Alias Negro Ángel o Sandro. Hombre alto, afro, rapado y cuya fachada es una veta de celulares. Controla Carabobo, entre Palacé y Colombia. Se le localiza por el sector Parque Berrio, en una zona llamada cambalache.
-Alias Yeyo, hombre viejo y bajo de estatura, se le ubica entre Maracaibo con Bolívar y Palacé con avenida De Greiff.
-Alias Fernando. Se le ubica detrás del Hotel Nutibara, donde parquean los buses que van para aeropuerto. Se moviliza en una moto pulsar de color rojo. Es la mano derecha de alias Don Omar, el hermano de alias Chavarría, un exsargento de la policía y al parecer dueño de una empresa de vigilancia.
–Alias el pollo Julián. Este sujeto desde su casa en Buenos Aires controla todo el sector La Bastilla y su mano derecha en este territorio es alias Aretes o David.
-Alias Pipe o alias El Muerto, Controla Carabobo hasta San Juan.
-Alias Jorge o Negro Damián. Controla Cundinamarca entre calles Calibio y Boyacá, anda otro sujeto, alias Cumbamba.
-Alias Areiza. Tiene de fachada un “pagadiario”. Se la pasa por Colombia y el sector Los Puentes en una moto pulsar de color amarillo. Al parecer padece cojera en un pie y está terminando la carrera de abogado. Es muy cercano a Lina, la secretaria de Cejas, y junto a ella recogen algunos dineros para una promotora de servicios, fachada de extorsión que aplican a algunos almacenes de ubicados en Carabobo, bolívar, Colombia y Tenerife.
Estos sujetos serían los coordinadores en el centro de Las Convivir, pero su estructura, como en múltiples ocasiones, podría variar debido a su nueva estrategia operativa. No obstante, el problema no es la cantidad de hombres que operen en el sector, lo preocupante es lo avanzado y tecnificado que esta el negocio de la extorsión, esta sí es una verdadera innovación en el crimen de la ciudad.
Espere informe especial: El tráfico de drogas en la comuna 10 (Candelaria) de la ciudad de Medellín. ¿Quién es Pedro Pistolas? el rey de la droga y responsable de pagar la nómina paralela policial.
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