El Ministerio de Salud expidió un nuevo protocolo de bioseguridad para que cines y teatros puedan operar con las medidas de precaución necesarias para evitar el contagio del covid-19.
Entre las medidas que incluye este protocolo está la distancia mínima que deben tener las sillas de los cines y teatros para evitar la transmisión del virus. Los locales deberán garantizar que haya espacios claramente señalizados para cada asistente individual o grupos de personas.
“Los grupos familiares o de personas que residan en la misma vivienda podrán utilizar máximo cuatro sillas o espacios continuos, guardando el distanciamiento de dos metros con otros grupos de espectadores y asistentes”, indicó Claudia Cuéllar, directora (e) de Promoción y Prevención.
Se autorizará el servicio de alimentos y bebidas de manera presencial, además de la virtual, siempre que se conserve una distancia de por lo menos dos metros entre personas. Los alimentos y bebidas comprados por los asistentes se deben entregar empacados, de tal manera que no estén expuestos al medio ambiente mientras los asistentes transitan hacia su ubicación.
Los espectadores no deben ingerir alimentos en ningún otro lugar diferente a su asiento o ubicación, ni caminando. Es responsabilidad de los operadores del evento garantizar lo anterior y que en los lugares donde se realice la actividad escénica, en las que se cuente con barras especiales para el consumo de alimentos se cumpla con el distanciamiento de dos metros entre los consumidores.
En el caso de los autocines y autoeventos, la venta de confitería se realizará únicamente al momento de la compra de la boletería, según el canal de venta designado por el responsable de la función/exhibición, quien a través de su personal se encargará de entregar los productos directamente en cada vehículo.
Bajo toda circunstancia está prohibido el consumo de bebidas embriagantes en salas de cine, teatros, autocines, autoeventos y otras infraestructuras de las artes escénicas.
El protocolo exige además la constante limpieza y desinfección de todas las zonas en donde haya alto tráfico de personas, la regulación y demarcación de zonas de ingreso y evacuación, la dotación permanente y suficiente de agua potable, jabón líquido y toallas desechables, entre otras.
El uso correcto del tapabocas es obligatorio y permanente, excepto cuando se vaya a consumir alimentos o bebidas en los lugares destinados para ese fin.
Tomado de El País de Cali