Berlín, 8 noviembre.- Alemania registró en las últimas 24 horas 16.017 nuevas infecciones por covid-19, una cifra muy inferior a los tres máximos consecutivos de las jornadas previas, pero que está condicionada porque en fin de semana no todas las oficinas regionales comunican sus nuevos casos.
El Instituto Robert Koch (RKI), centro epidemiológico de referencia, había identificado este sábado su registro máximo absoluto, con 23.399 casos, tras los récord previos del viernes (21.506) y el jueves (19.990). El anterior máximo eran los 19.059 del 31 de octubre, hace ocho días.
En comparación, el pasado domingo se anunciaron 14.177 nuevos casos, 1.840 casos menos. Esta referencia es comparable y puede resultar orientativa sobre la tendencia de la propagación de la enfermedad.
El RKI registró además que 63 personas murieron en las últimas 24 horas con o por covid-19.
En total, 658.505 personas se han infectado con el coronavirus en Alemania, de las que 11.289 han muerto. La tasa de reproducción a siete días se sitúa en el 1,04, lo que significa que cada nuevo contagiado infecta, de media, poco más de una persona.
Alemania lleva una semana bajo una nueva batería de restricciones a la vida pública y la actividad económica con el objetivo de controlar la propagación del coronavirus. Bares, restaurantes, teatros, cines, gimnasios, spas y museos deben permanecer cerrados. Comercios y colegios siguen abiertos.
Las reuniones se han limitado a diez personas de como máximo dos hogares, el turismo se ha prohibido y se recomienda el trabajo a distancia siempre que sea posible.
La canciller alemana, Angela Merkel, ha calificado de «dramática» la situación del país y advertido de que el sistema sanitario puede llegar al máximo de su capacidad en cuestión de «semanas».