Washington, 20 enero.- El presidente electo de EE.UU., Joe Biden, y la vicepresidenta electa, Kamala Harris, llegaron al Capitolio para su toma de posesión que comenzará en una hora y se desarrollará en una ciudad convertida en una fortaleza con decenas de vallas y 25.000 miembros de la Guardia Nacional.
Biden y Harris llegaron al Congreso escoltados por autos de policía en dos vehículos negros y acudieron acompañados de sus esposos, Jill y Doug, respectivamente.
Los cuatro se detuvieron por un momento para hablar con algunos congresistas, como la senadora por Minesota Amy Klobuchar, y subieron juntos la escalinata del Capitolio para saludar a los presentes desde la parte de arriba.
AMENAZA DE BOMBA EN EL TRIBUNAL SUPREMO
Casi al mismo tiempo, una portavoz del Tribunal Supremo de EE.UU. informó en un comunicado que el edificio, que se encuentra enfrente del Congreso, había recibido una amenaza de bomba, por lo que se procedió a inspeccionar las instalaciones y se decidió que no hacía falta desalojarlas.
La ciudad está en máxima alerta desde que el pasado 6 de enero cientos de seguidores radicales del presidente saliente de EE.UU., Donald Trump, asaltaran el Capitolio, un suceso que conmocionó al país y que arrebató la vida a cinco personas, incluido un policía.
Uno de los policías del Capitolio que intentó contener a los asaltantes, el afroamericano Eugene Goodman, se encargará de escoltar a Harris, que hoy se convertirá en la primera mujer, la primera afroamericana y la primera persona de procedencia asiática en asumir la Vicepresidencia de EE.UU.
UNA CARTA PARA BIDEN
Rompiendo con la tradición, Trump no asistirá hoy a la ceremonia de investidura de su sucesor y ya puso rumbo a su mansión privada en Palm Beach (Florida).
El mandatario saliente, sin embargo, sí ha dejado en el Despacho Oval de la Casa Blanca una carta a su sucesor, tal y como manda la tradición, de acuerdo con la cadena Fox, que no detalló el contenido de la misiva.
Con la salida de Trump de la Casa Blanca, concluyen cuatro años turbulentos marcados por la polémica en los que pasará a la historia como el primer presidente de EE.UU .al que se le han abierto dos procesos de enjuiciamiento político, el segundo de los cuales está aún pendiente de ventilarse en el Senado.