Tomada de www.colombia.com
En el doloroso historial de la violencia en Colombia se han escrito tesis tituladas “matar, rematar y contramatar”, en referencia a esos casos en los que los asesinos no sólo les quitan la vida a sus víctimas, sino que, después, dedican más tiempo a desaparecer el cuerpo, a descuartizarlo o arrojarlo a un río con el propósito de borrarlo de la faz de la tierra, como si nunca hubiera existido. Continuar leyendo aquí