Roma, 22 marzo.- Italia sumó 13.846 nuevos casos de coronavirus y 386 fallecidos en las últimas veinticuatro horas, mientras el país sufre un aumento de la presión hospitalaria, con un 42 % de las camas ocupadas por pacientes de COVID-19, según la Agencia Nacional de Servicios Regionales de Salud (AGENAS).
Como es habitual cada lunes, el número de casos detectados, 13.846, es inferior al de la jornada anterior, 20.159, aunque también se realizaron menos pruebas: 169.196 hoy, frente a los 277.086 test del domingo.
Los fallecidos, 386, suponen un fuerte incremento respeto a los 300 notificados la víspera y elevan la cifra total de muertos con coronavirus desde que empezó la emergencia en Italia en febrero de 2020 a 105.328 personas, mientras que el número total de contagiados alcanza las 3.400.877 de personas.
La presión hospitalaria sigue creciendo y, de los 563.067 actuales positivos por coronavirus, 31.559 están ingresados, 627 enfermos más que la víspera. De ellos, 3.510 reciben además cuidados intensivos (+62).
Los hospitalizados por COVID-19 en Italia si sitúan en el 42 % del total, por encima del 40 % del nivel de alerta, mientras que las UCI cuentan con un 38 % de ingresados por coronavirus, por encima del 30 % de alarma, según la AGENAS.
Por su parte, la campaña de vacunación -que desde el pasado viernes recuperó el uso de la vacuna AstraZeneca- alcanzó hoy las 7.894.659 dosis suministradas, mientras que 2.511.145 personas han sido inmunizadas con las dos dosis necesarias.
El caos en la gestión de la campaña de vacunación en la región de Lombardía (norte), motor económico de Italia y la que más ha sufrido los efectos la pandemia, ha llevado este lunes a las autoridades locales a intervenir la empresa encargada.
Las restricciones en Italia establecen que todas las regiones que superen la incidencia semanal de 250 contagios por cada 100.000 habitantes pasarán a «zona roja», un confinamiento blando con todas las tiendas no esenciales cerradas.
Nueve regiones y la provincia autónoma de Trento -unos 40 millones de italianos- están en este tipo de confinamiento blando, mientras que el resto del país se encuentra en la «zona naranja» de riesgo intermedio.
