Buenos Aires, 18 may – Las elevadas cifras de contagios y fallecidos diarios por covid-19 en Argentina, que este martes ha anotado un récord con 35.543 nuevos positivos y 745 muertes, elevan la preocupación por el devenir de la pandemia y la lenta llegada de vacunas.
Hasta ahora, se han inoculado más de 10 millones de dosis, pero solo poco más de dos millones corresponden a la segunda aplicación.
Este viernes culminará la última tanda de restricciones anunciada por el Gobierno de Alberto Fernández para frenar el virus -que aunque afecta principalmente a Buenos Aires y su alfoz ya vuelve a propagarse fuertemente en otras zonas, como Córdoba-, mientras se ultiman las medidas que regirán desde ese día.
«Nos tiene que doler cada vez que vemos el número de 500 muertes en un día, y nos tiene que llamar a la reflexión», expresó hoy el presidente Alberto Fernández en una entrevista radial.
Aunque descartó volver a un confinamiento duro, sí pidió a las autoridades de cada jurisdicción que controlen más el cumplimiento de las restricciones existentes.
EL 17,77 % DE LA POBLACIÓN, CON UNA DOSIS
Hasta el momento, Argentina, con 45,8 millones de habitantes, ha recibido más de 12,6 millones de vacunas, de las que hasta este martes ya habían sido distribuidas para su aplicación en todo el territorio 11.763.270.
Según el Monitor Público de Vacunación, ya se han aplicado 10.193.368, de las que 8.141.608 corresponden a primeras dosis -el 17,77 % de la población- y 2.051.760 a las segundas -el 4,47 %-. La mayoría en personas de 60 o más años y personal sanitario.
La campaña se ha llevado adelante hasta ahora principalmente con la rusa Sputnik V, pero también con la china Sinopharm, la Covishield de India con la tecnología de AstraZeneca/Universidad de Oxford y las dosis de esta última farmacéutica que llegaron por el mecanismo Covax de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Todas ellas, al igual que las 4 millones de vacunas de AstraZeneca que se prevé lleguen este mes, requieren de la aplicación de dos dosis, aunque en la Sputnik V son dos componentes diferentes: del primero llegaron hasta ahora alrededor de 5,97 millones de dosis y del segundo 1,06 millones.
Es así que, más allá de la estrategia del Ejecutivo de espaciar la aplicación de la segunda para vacunar al mayor número de personas con la primera, se torna crucial recibir segundos componentes de la vacuna rusa para que no se supere el intervalo máximo de 3 meses que se recomienda pase entre ambas.
¿QUÉ PASARÁ EN LA CAPITAL?
Las restricciones vigentes son más o menos estrictas dependiendo del estado epidemiológico de cada zona del país. El principal foco de contagio sigue siendo el área metropolitana de Buenos Aires -que incluye a la ciudad y al cordón de localidades que la rodea-, en el que las camas de cuidados intensivos están al 76,2 % de su capacidad.
En esa zona se prohíbe circular por la noche y se cancelaron las clases presenciales, aunque esto último no se cumple en la capital por la negativa de su alcalde, el opositor Horacio Rodríguez Larreta, avalado por la Corte Suprema.
«Todavía estamos procesando una ola en la antesala del invierno. El momento es extremadamente delicado y todos tenemos que hacer un esfuerzo enorme», dijo este martes el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, que alertó que, tras varios días de bajada del número de casos, en los últimos 3 o 4 han empezado a ascender nuevamente.
El ministro volvió a defender la presencialidad de las escuelas -donde recalcó que «los protocolos se cumplen de manera muy estricta»- y aunque reconoció que el Gobierno local aún no decidió su postura acerca de las medidas que rijan desde el viernes, rechazó volver a una cuarentena estricta como la de 2020.
«Llevamos demasiado tiempo con demasiado daño y queda muy poca reserva en cuanto a la vida y salud de las personas, como la reserva emocional y económica», agregó.
RÉCORD EN LA SEGUNDA OLA
En lo que va de pandemia, Argentina -donde circulan varias de las variantes originadas en otros países- ha registrado 3,37 millones de contagiados de coronavirus, con récord de casos diarios en la actual segunda ola, y siguen cursando la enfermedad 307.412.
En total, han fallecido 71.771 personas, y este martes se registró el pico absoluto tanto de muertes, 745, como de positivos, 35.543.
«Lo que pido es que se entienda lo que está pasando y que además se hagan cargo. Esta mayor cantidad de casos que ocurren es el resultado de decir que la vida siga como si no pasara nada», destacó hoy Fernández en clara alusión a la principal oposición, partidaria de una mayor libertad de movimiento.
EFE