Moscú, 2 junio.- Las autoridades rusas aceleran la purga de la oposición con vistas a las elecciones legislativas de septiembre, mientras el presidente ruso, Vladímir Putin, respaldaba hoy al partido del Kremlin, Rusia Unida, al que apoya menos de un tercio de los rusos, según los sondeos.
«Tiene lugar una purga del espacio político. El régimen de Putin ha lanzado una campaña de eliminación de toda resistencia o crítica al poder», comentó hoy a Efe el opositor Guennadi Gudkov, exdiputado exiliado en Bulgaria.
Su hijo, Dmitri, también antiguo diputado de la Duma o Cámara Baja, fue detenido ayer, martes, en el marco de un proceso penal, que su padre y sus correligionarios consideran un claro caso de «persecución política».
REGISTROS CON NOCTURNIDAD
Gudkov ha sido acusado de estafa en gran cuantía por impago de arrendamiento de un local comercial, cargo que podría suponerle una pena de cárcel de hasta cinco años.
Además del opositor, que se encuentra en prisión preventiva, también fueron interrogadas varias personas asociadas a la firma que supuestamente cometió el delito.
«Las autoridades utilizan los más fantásticos métodos para eliminar a sus rivales. Muchos de los interrogados con nocturnidad son gente corriente que nunca ha estado implicada en política», explicó Guennadi Gudkov.
Los registros practicados por decenas de agentes armados con fusiles automáticos se prolongaron «hasta las 05.00 de la mañana», dijo el opositor, quien calificó de «absurda» la acusación, ya que su hijo no tiene «nada que ver» con la compañía afectada.
DETENIDO A BORDO DEL AVIÓN
También fue detenido el antiguo director del grupo opositor Rusia Abierta, Andréi Pivovárov, que pasará dos meses en prisión preventiva por participar en las actividades de una organización no gubernamental extranjera considerada «indeseable» por el Estado ruso.
Pivovárov fue sacado el lunes del avión que estaba a punto de despegar en el aeropuerto de San Petersburgo con destino a Varsovia.
«Las fuerzas de seguridad y el bloque político (del Kremlin) sabían que yo planeaba participar en las elecciones y que quería presentarme. Vemos una tendencia en la que todos aquellos que anuncian que se presentarán a las elecciones se topan con problemas», dijo.
Sus abogados recuerdan que la semana pasada Pivovárov anunció la disolución del movimiento opositor, fundado en 2014 por el magnate ruso Mijaíl Jodorkovski para promover, entre otras cosas, el activismo político y la observación de las elecciones en Rusia.
«Las detenciones (..) difícilmente se las puede relacionar con demandas políticas, ya que las acusaciones que presentan las fuerzas del orden no tienen relación alguna con la política», replicó el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
Con todo, Gudkov mantiene que el catalizador de las actuales purgas, que comenzaron con el envenenamiento en agosto de 2020 del líder opositor, Alexéi Navalni, son las elecciones legislativas y su objetivo es «impedir cualquier posible participación en la campaña electoral».
«Rusia se está volviendo un país reaccionario, agresivo y dictatorial. Un estado policial muy peligroso para sus ciudadanos y los de otros países. La senda es casi idéntica a la de Bielorrusia», afirmó.
ESPALDARAZO DE PUTIN AL PARTIDO DEL KREMLIN
Mientras, Putin mantuvo una reunión con los dirigentes de Rusia Unida a los que elogió por poner «en el primer plano los intereses de la gente».
«Estoy seguro de que la gente tiene muchas críticas que hacerle a la principal fuerza política. Pero, en general, el partido participa de manera productiva (…) en el desarrollo social y económico del país», dijo.
Putin también escuchó las propuestas de los candidatos locales de Rusia Unida que fueron elegidos en las recientes primarias, en las que, según sus críticos, muchos profesores, sanitarios y funcionarios fueron obligados a votar, algunos so pena de despido.
«El país no se lo entregaremos a nadie», dijo una activista durante la reunión telemática.
Putin debería promulgar en breve la ley, que hoy fue unánimemente aprobada por el Senado, que prohíbe a cualquier persona involucrada en las actividades de organizaciones consideradas extremistas presentar sus candidaturas en elecciones locales y federales.
Según los colaboradores de Navalni, la ley, que apunta directamente a las organizaciones del opositor, podría afectar a más de 200.000 personas que trabajaron o colaboraron con su movimiento.
Además, la medida es retroactiva, motivo por lo que fue rechazada en la Duma por la oposición comunista y fue considerada «anticonstitucional» por los partidarios de Navalni.
«En Rusia se ha adoptado una ley que reconoce como cómplices de extremismo todos aquellos que estén vinculados, de alguna forma, con Navalni. Esta ley apesta a fascismo», dijo hoy en Twitter Iliá Yashin, aliado del líder opositor.
