Sao Paulo, 2 junio.- La brasileña JBS, mayor productor de carne del mundo, informó que «la gran mayoría» de sus plantas en Estados Unidos, Canadá y Australia volvieron a operar este miércoles, tras verse afectadas por un ataque informático que investiga el FBI.
«La gran mayoría de nuestras unidades de carne bovina, porcina, de aves y alimentos preparados» en Norteamérica y Australia volvieron a estar operacionales este miércoles, informó la empresa en un comunicado remitido al mercado financiero.
La compañía, presente en 15 países, sufrió, según las autoridades estadounidenses, un ataque de «ransomware», que consiste en que piratas informáticos bloquean los sistemas de una empresa o institución y piden un rescate para que sean liberados.
JBS informó que sus operaciones en México y Reino Unido «no fueron impactadas» por el ataque y que en las últimas horas ha habido «avances significativos» para solucionar los daños que sí hubo en sus operaciones en «Norteamérica y Australia».
«Los sistemas están volviendo a funcionar. JBS EE.UU. no está ahorrando esfuerzos en combatir esta amenaza», señaló la nota.
La empresa, que es responsable de hasta el 20 % de los productos cárnicos procesados en EE.UU., afirmó que «no tiene conocimiento de ninguna evidencia en este momento de que los datos de algún cliente, proveedor o empleado se hayan visto comprometidos».
Asimismo, agradeció el «fuerte apoyo» recibido por parte de los Gobiernos de Estados Unidos, Australia y Canadá, por medio de «conferencias diarias» con las autoridades de esos países con el «objetivo de garantizar el suministro de alimentos».
La portavoz adjunta de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, apuntó en la víspera que el ataque «procedió de una organización criminal probablemente basada en Rusia» y que lo está investigando el FBI.