Lima, 30 julio.- Pedro Castillo comenzó este viernes a ejercer con toda la formalidad el cargo de presidente de Perú, al recibir el reconocimiento institucional de su mando supremo por parte de las FF.AA. mientras en el país arreciaban las críticas de diversos sectores hacia su «inaceptable» Ejecutivo.
Tras una reunión religiosa en un templo evangélico – religión que profesa gran parte de su familia, muy devota – el mandatario cumplió con la tradición y participó como invitado de honor en el desfile militar que las Fuerzas Armadas ofrecen a su presidente con motivo de la fiesta nacional peruana y que sirve como muestra de la aceptación militar de su mando.
Acompañado por los flamantes miembros de su gabinete, entre ellos el primer ministro Guido Bellido y el ministro de Defensa, Walter Ayala, así como por todas las altas autoridades del Estado, Castillo acudió al Cuartel General del Ejército para participar en la ceremonia en la que se recordó a los mártires de la independencia peruana, así como a las víctimas del terrorismo y de la pandemia de covid-19.
El desfile fue observado tan solo por unas 60 autoridades, las únicas personas invitadas al recinto por las limitaciones causadas por la covid-19.
A falta de pocos minutos para que terminara el desfile, Castillo se retiró súbitamente de la ceremonia, que continuó sin él pero con la presencia de sus ministros, después de que se conociera que un fuerte sismo de magnitiud 6,1 en la escala de Ritcher había golpeado la ciudad de Sullana, en el norte del país.
De momento, no se reportan víctimas mortales de ese temblor.
SEVERO ANÁLISIS
Mientras Castillo se ocupaba de las formalidades del cargo presidencial, los medios y la ciudadanía continuaron con el severo análisis y las críticas furibundas que ha despertado el anuncio de su primer gabinete ministerial, que ha sido descrito como «inaceptable», «un golpe bajo», «un caos» e incluso como «una bomba».
La figura de Bellido, un congresista de un notorio perfil izquierdista radical, machista y homófobo, muy próximo al líder del partido oficialista Perú Libre, Vladimir Cerrón, un exgobernador regional condenado por corrupción, ha sido vista de forma muy negativa por propios y extraños que ven en ella «una pésima señal».
Entre otras cosas, el primer ministro está bajo investigación por apología del terrorismo, después de que durante una entrevista evitara calificar como tal los ataques de la banda Sendero Luminoso en las décadas de 1980 y 1990, que dejaron alrededor de 70.000 muertos en el país.
El resto del Ejecutivo, al que le falta aún la pieza clave del Ministerio de Economía después de que el candidato que parecía ofrecer más seguridad y estabilidad para el puesto, Pedro Francke, renunciara a asumir el cargo, tampoco ha sido mejor recibido.
El gabinete ministerial es un grupo muy político, dominado por sectores izquierdistas, con algún técnico, apenas dos mujeres y al que también le falta un ministro de Justicia.
Para el diario El Comercio, Bellido lleva al Gobierno de Castillo «vicios antidemocráticos» por su defensa de que Cuba es una «democracia» y preside un Ejecutivo plagado de «improvisación» y que «empezó defraudando».
El conservador diario Expreso subrayó por su parte el carácter beligerante del nombramiento de Bellido, que «busca provocar al Congreso para que no le dé el voto de confianza» y así cerrar el Parlamento y «gobernar con decretos de urgencia».
Esta tesis también ha sido ofrecida por numerosos analistas, políticos y periodistas durante toda la jornada.
Incluso el diario La República, de tendencia progresista, calificó de «golpe bajo» la designación de un hombre «con posiciones homofóbicas y machistas» como Bellido, cuya elección revela «sin duda la ruptura del compromiso básico de mantener al país lejos de cualquier amenaza extremista».
CORREGIR
Las críticas llegaron también desde otros sectores, como la ONG Asociación Civil Transparencia, quien pidió al presidente corregir el nombramiento de Bellido por sus declaraciones «inaceptables» sobre Sendero Luminoso y su discurso «homofóbico y machista».
«Esta decisión produce tensión en incertidumbre en un momento que demanda consensos para atender las urgencias del país y de condiciones para discutir democráticamente las propuestas del gobierno», afirmó la organización.
Sin embargo, durante la jornada, diversas fuerzas políticas de derecha y extrema derecha parlamentaria indicaron que, si bien no les gusta ni la figura de Bellido ni del resto del Ejecutivo, aguardarán aún a la presentación de sus planes de Gobierno antes de decidir si le otorgarán o no su confianza en la cámara.
Otros, como el Partido Morado (liberal), que integra el expresidente Francisco Sagasti, ya exigieron que «no se dé la confianza al gabinete».
De modo simbólico, pero también de forma esperada, tanto el tipo de cambio de sol respecto al dólar como los índices bursátiles se desplomaron al inicio de la jornada.
El sol superó la barrera psicológica de las 4 unidades por dólar, un registro nunca antes visto, mientras que los principales indicadores de la Bolsa de valores de Lima habían perdido en torno al 3 % a media jornada.
Álvaro Mellizo