Bogotá, 10 de diciembre de 2021.- Veintiún militares y un civil que fueron imputados por la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) de Colombia por actos de crímenes de guerra y de lesa humanidad reconocieron su responsabilidad en el asesinato de hasta 247 jóvenes inocentes para presentarlos como bajas guerrilleras en combate, en el caso conocido como «falsos positivos».
Se trata de 22 de los 26 personas (todos militares menos un civil) que la JEP ha imputado hasta ahora en dos autos emitidos, entre los que se incluye el general retirado Paulino Coronado, el militar de mayor rango que reconoció su responsabilidad y presentó sus «sentimientos de perdón por el gran dolor causado por los execrables actos cometidos (…), conllevando al deceso de seres inocentes que se presentan como combatientes», según transmitió a la alta corte.
Por otro lado, los coroneles Publio Hernán Mejía y Juan Carlos Figueroa, comandantes del Batallón La Popa durante 2002 y 2004 y 2004 y 2005, respectivamente, negaron su responsabilidad y serán enviados a la Unidad de Investigación y Acusación (UIA), donde pueden enfrentarse a una sentencia de hasta 20 años de cárcel.
EFE