Medellín (Colombia), 10 de febrero de 2022.- Se presenta como vendedora, pero Luzmila Bedoya realmente se ha dedicado en los últimos siete años a cumplirle deseos a los pobladores de El Zarzal, un caserío apartado del municipio colombiano de Ebéjico, donde abrió un «almacén único» para hacer feliz a su clientela.
«Yo quiero mucho a la gente porque mi empresa existe gracias a la comunidad. Ha sido lo que ellos han pedido, por eso funciona», dijo a Efe Bedoya.
‘Variedades Breiner Caro’ nació entre refrescos y helados durante la construcción de un espacio deportivo en el colegio del poblado. En los días calurosos, la emprendedora llevaba jugo y agua a los trabajadores, quienes se convirtieron en sus primeros clientes.
«Me pidieron que les llevara otras cosas y ahí empezó», contó la propietaria de este negocio, ubicado en el departamento de Antioquia (noroeste), que actualmente vende productos de la canasta familiar, artículos escolares y de papelería, y además presta servicios bancarios.
ESPÍRITU DE PERSEVERANCIA
En una pequeña vitrina que le regalaron puso caramelos para los niños y parte de sus sueños, que empezaron a tomar forma por una casualidad: Encontró en el piso un volante publicitario de Interactuar, una corporación de desarrollo social que acompaña a emprendedores y empresarios de la microempresa.
«Ese volante decía algo como ‘hacemos que su negocio crezca’, por eso llamé para pedir un préstamo», recordó Bedoya, que fue recolectora de café.
Según su relato, ha recibido seis créditos y capacitaciones virtuales. Con ese dinero amplió el surtido, hizo pedidos a Medellín y realizó adecuaciones para atender la gran demanda que de repente empezó a tener.
Pese al éxito alcanzado, que le permitió quedarse con el galardón «Mérito a la Perseverancia» en los premios Famiempresario del Año 2021, la historia «no ha sido color de rosa». Ella y su familia tuvieron que reponerse a un robo y sortear después los desafíos que les planteó la pandemia.
«Fue duro porque el colegio cerró, pero atendí a través de una reja y escuché lo me pedía la gente en ese momento», comentó la emprendedora.
Hoy se siente una líder por lo que representa para toda la aldea su almacén, que no ha parado de crecer y cumple deseos más específicos, como traer ropa desde Medellín para que sus vecinos puedan tener su «pinta (vestuario) de diciembre», por ejemplo.
En esa zona rural, que está a casi 40 minutos del pueblo, también ofrece recargas electrónicas y el pago de servicios.
«En mi negocio encuentran de todo; me gusta ver a la gente feliz», acotó Bedoya, quien inició una remodelación en ‘Variedades Breiner Caro’ con los estímulos económicos que recibió con el premio, y ya proyecta la apertura de una sección de ferretería, algo que le reclaman sus clientes.
IMPULSO A PEQUEÑOS NEGOCIOS
El líder de riesgo y analítica del negocio Interactuar, Christian Reyes, señaló que esa corporación se ha concentrado en los últimos años en atender al segmento ‘De cuenta propia’, que corresponde a emprendedores pequeños y con pocas oportunidades, como fue en su momento Luzmila.
«A este segmento pertenece la mayoría de microempresas en Colombia. Necesitan acompañamiento y acceder a recursos, sentir inclusión y que no están solos», expresó a Efe Reyes.
Precisó que el 30 % de los desembolsos que realiza mensualmente Interactuar corresponden a créditos menores a dos millones de pesos, que han entregado a más de 1.200 clientes, atendidos en menos de dos horas.
El experto aseguró que ocuparse de este tipo de negocios aporta en la «construcción de país», pues se convierten en «una competencia directa del ‘gota a gota’, de los agiotistas».
Jeimmy Paola Sierra
EFE
