Bogotá, 10 de marzo de 2022.- Los colombianos podrán votar este domingo también en alguna de las consultas internas que las coaliciones de partidos están realizando para escoger a su candidato para las presidenciales del 29 de mayo, en una contienda en la que se pasará de casi una veintena de aspirantes a apenas media decena.
Junto a los «tarjetones» de cada partido a la Cámara y al Senado, los votantes podrán pedir el de una de las tres coaliciones -Pacto Histórico (izquierda), Centro Esperanza (centro) y Equipo por Colombia (derecha)- que celebran consultas internas, entre las que hay muchas dudas y pocas certezas.
«No es la primera vuelta electoral aunque pareciera que ahora hay tres vueltas presidenciales en Colombia», explica a Efe la politóloga y profesora de la Universidad de los Andes Laura Wills, quien destaca que a pesar de la complejidad de las elecciones del domingo, tantas votaciones simultáneas muestran un dinamismo político.
Además, el espectro político ha crecido y las coaliciones «se ubican ideológicamente como no había pasado antes», según Wills, y se empieza a aceptar que hay «partidos de derecha, de izquierda y de centro», «un fenómeno que antes no ocurría”, en un país donde la izquierda ha estado históricamente demonizada y relacionada con la guerrilla.
Sin embargo, «en cada una de las coaliciones hay candidatos que no necesariamente coinciden en las ideas», y que están chocando internamente, lo que provoca que en algunas «en vez de una coalición, parece más bien una colisión», apunta la politóloga.
EL ÚNICO CANDIDATO CLARO
De las tres coaliciones hay una más unida que el resto: el Pacto Histórico, y donde parece bastante obvio que resultará elegido como candidato presidencial Gustavo Petro, quien le disputó la Presidencia en segunda vuelta a Iván Duque en 2018 y que actualmente aparece como favorito en todas las encuestas.
La duda en esta amalgama de partidos y formaciones de izquierdas, donde están también incluidas organizaciones indígenas, una facción del Partido Verde que se ha disgregado de la coalición de centro o históricos partidos como el victimizado Unión Patriótica, es quién concurrirá con Petro como fórmula vicepresidencial.
Un acuerdo interno prometía que sería la segunda persona más votada, aunque aliados cercanos al senador ya han manifestado que esa no es una decisión vinculante y que depende de si otros partidos, como el Liberal, quieren unirse.
UNA COALICIÓN QUE HACE AGUAS
La coalición que más problemas internos ha tenido ha sido la de Centro Esperanza, donde confluyen fuerzas como parte del Partido Verde, antiguos partidos revividos como el Nuevo Liberalismo o candidatos curtidos y con gran aceptación como el exalcalde de Medellín Sergio Fajardo, que quedó tercero en las elecciones de 2018.
Las dudas son muy grandes sobre quién podría resultar ganador en la consulta de esta formación, aunque en las encuestas generales Fajardo sigue siendo el que más adeptos recaba.
Los primeros roces surgieron cuando el exministro de Salud Alejandro Gaviria aceptó en su formación a dos políticos tradicionales, y la entonces precandidata Íngrid Betancourt lo criticó por juntarse con «maquinarias», tildados de mañas políticas dudosas.
Desde entonces todo ha sido fuego cruzado entre los precandidatos y Betancourt se salió de la coalición para lanzarse a la Presidencia en solitario, lo que podría indicar la desintegración tras el domingo.
«Ahí nos vamos a dar cuenta de si los que pierden en esas coaliciones apoyan o no a los ganadores», resalta Wills, que no tiene claro que los perdedores vayan a cumplir ese compromiso.
EL POLÉMICO PRECANDIDATO
El Equipo por Colombia es una unión de políticos con experiencia sobre todo regional donde está los exalcaldes Enrique Peñalosa (Bogotá), Alejandro Char (Barranquilla) y Federico Gutiérrez (Medellín).
«Es la coalición de la derecha, sin que esté ahí el candidato del uribismo (del Centro Democrático), que es Óscar Iván Zuluaga», resume Wills.
Los candidatos de esta coalición se han cerrado en torno a Char, tras la publicación de un escándalo de compra de votos que no ha tenido repercusiones en la campaña del exalcalde, pero sí en la opinión pública.
«Char es un político tradicional de una familia política muy poderosa de Barranquilla y de la costa Caribe que por un lado tienen una imagen de haber generado mucho progreso en la ciudad, pero a grandísimos costos de un estilo de gobierno muy autoritario, muy clientelista, con corrupción en el medio, eso puede ser muy costoso para él como candidato y para la coalición que no tomó ninguna medida de sanción», esgrime Wills.
Las opciones de Char no parecen claras y puede verse opacado por la popularidad de «Fico» Gutiérrez o de Peñalosa, pero a la vez el candidato de esta unión de exgobernantes locales tendrá que buscar los votos conservadores contra dos aspirantes ya firmes como Óscar Iván Zuluaga -que cuenta con el apoyo del expresidente Álvaro Uribe- y con el populista Rodolfo Hernández, al que algunas encuestas sitúan como segundo.
Las consultas partidistas podrán ser un termómetro para la izquierda, por ejemplo, donde la dirección del voto parece claro y se podrá medir cuántos acuden al llamado de Petro, pero no parece tan evidente en los otros casos, donde se pueden colar votos que el 29 de mayo vayan en otra decisión o personas que dejen de acudir a las urnas si su precandidato no gana.
En ese sentido, el propio presidente Duque dijo la semana pasada en una entrevista con Blu Radio que iba a votar en las consultas, a pesar de que en teoría su candidato, como miembro del Centro Democrático, ya está decidido.
Irene Escudero
EFE
