Moscú, 8 de abril de 2022 – Rusia ha comenzado a proyectar la estación interplanetaria Venus-D con la intención de proceder a su lanzamiento dentro de una década sin colaboración con las agencias espaciales occidentales.
«Ahora nos encontramos justo en la primera fase del proyectado. Nosotros nos encargaremos de la parte científica y el Instituto Lávochkin, de la técnica», informó hoy en rueda de prensa Anatoli Petrukovich, director del Instituto de Investigaciones Espaciales de la Academia Rusa de Ciencias.
Explicó que el hecho de que Rusia se encargue de diseñar todos los aspectos técnicos de la Venus-D le permitirá evitar «los problemas» que ahora afronta el Exomars tras la reciente suspensión de su lanzamiento por parte de la Agencia Espacial Europa (ESA) debido a la campaña militar rusa en Ucrania.
El jefe de la agencia espacial rusa, Roscosmos, Dmitri Rogozin, admitió a finales de 2021 que la NASA podría renunciar al proyecto ruso-estadounidense de Venus-D.
Rogozin explicó que la misión Venus-D consistirá en un módulo de descenso con autonomía de casi 24 horas para extraer muestras del suelo de dicho planeta.
El lanzamiento de la sonda Venus (Venera, en ruso) D estaba inicialmente previsto inicialmente para 2013 pero se retrasó debido a los problemas de financiación.
En un primer momento, se estimaba que la realización de la parte rusa del proyecto requeriría inversiones por valor de unos 240 millones de dólares, mientras la NASA debía aportar 300 millones.
El lanzamiento debería tener lugar aproximadamente dentro de una década, según expertos.
En su momento, Roscosmos comentó el hallazgo mediante observaciones astronómicas en la atmósfera de Venus de fosfano, un gas que se puede considerar un marcador químico de condiciones para la existencia de formas de vida.
En su opinión, el estudio de Venus es más importante que el de Marte, ya que puede ayudar a prevenir el desarrollo del efecto invernadero en la Tierra.
EFE