Bruselas, 16 de septiembre de 2022.- La jueza Laurence Massart, presidenta del tribunal que juzga a los acusados de los atentados terroristas perpetrados el 22 de marzo de 2016 contra el aeropuerto y el metro de Bruselas, que causaron 32 muertos, instó este viernes a desmontar las cajas de cristal en las que debían comparecer.
«La caja, en su configuración actual, viola el artículo 6 del Convenio Europeo de Derechos Humanos», decidió hoy Massart, que ordenó el «desmantelamiento de la caja en su configuración actual» para, a más tardar, el 10 de octubre, indicó la agencia Belga.
El 12 de septiembre se inició el juicio con una audiencia preliminar en la que se debatieron cuestiones de procedimiento, como las polémicas cajas de cristal cerradas e individuales donde debían estar los acusados durante el proceso.
La defensa fue unánime a la hora de pedir a la presidenta del tribunal el desmantelamiento de unos espacios acristálalos que definieron como “jaulas”, al considerar que contravenían la presunción de inocencia y que impedían la comunicación directa con sus clientes.
Los abogados advirtieron de que existía el riesgo de que el juicio no pudiera concluirse en esas condiciones, ya que los acusados no estaban dispuestos a comparecer en esos espacios.
Por su parte, los letrados de las partes civiles se mostraron más divididos y argumentaron que era necesario encontrar «un difícil equilibrio» entre los derechos de la defensa y las medidas de seguridad.
Según la Fiscalía federal, la construcción de las cajas de cristal constó 250.000 euros.
Ente los diez acusados que son juzgados por estos atentados figuran Salah Abdeslam, único superviviente de los atentados de París del 13 de noviembre de 2015, y Mohamed Abrini y Osama Krayem, que formaban parte de los dos comandos de los atentados de Bruselas, pero que renunciaron en el último minuto a inmolarse.
En este proceso judicial, seis de los acusados (Salah Abdeslam, Mohamed Abrini, Sofien Ayari, Osama Krayem, Ali El Haddad Asufi y Osama Atar) ya han sido condenados por los ataques que tuvieron lugar en la capital francesa.
El juicio, que se prolongará entre seis y nueve meses, se celebra en los edificios que hasta 2018 albergaban la sede de la OTAN y cuya puesta a punto costó unos 9,8 millones de euros.
El 22 de marzo de 2016 se produjeron dos primeras explosiones en el aeropuerto de Zaventem, cercano a Bruselas. Allí murieron 16 personas y un centenar resultaron heridas.
En la estación de metro de Maalbeek, a escasos doscientos metros de la sede de la Comisión Europea, una tercera explosión mató a otras 16 personas e hirió a otro centenar.
EFE