Doha, 25 nov- Argentina y México, dos viejos conocidos, encaran sus intereses en un duelo clave en Qatar 2022, prematuro, en plena fase de grupos, desviado de su previsión inicial por los inesperados resultados obtenidos en los primeros partidos.
La derrota impensable frente a Arabia Saudí dispara la relevancia del cara a cara del estadio Lusail. Importante para ambos, porque México no pasó del empate frente a Polonia en su compromiso y la situación del cuarteto se enredó, abierta a todo.
Esa igualada alivió la perspectiva de la selección albiceleste que asume el compromiso consciente de la relevancia de la cita y del estado físico de Leo Messi, que no termina de encontrar el tono adecuado y que está sometido a cuidados permanentes por su cuerpo técnico.
Con la Pulga como líder, Argentina pretende reconducir la situación y volver al carril del que le sacó Arabia Saudí. Ante sí, un adversario al que intimida en cuanto tira de historia. En treinta y cinco enfrentamientos anteriores, dieciocho victorias fueron albicelestes y trece terminaron en empates. México solo logró ganar cuatro de los partidos.
A lo largo de los Campeonatos del Mundo la historia no da opción al conjunto de Gerardo ‘Tata’ Martino. Las tres veces que coincidieron en un evento como este siempre ganó Argentina. Así ocurrió en Uruguay 1930 (6-3), en Alemania 2006 (2-1) y en Sudáfrica 2010 (2-1).
Lionel Scaloni, que enterró su buena racha en Lusail, apunta a cambios ante México. Especialmente señalada quedó la zaga donde podría haber hasta tres variantes. En los laterales, con la entrada de Marcos Acuña en lugar de Nicolás Tagliafico, y de Gonzalo Montiel por la derecha, en detrimento de Nahuel Molina.
Pero también puede dar un giro en el centro de la zaga y sustituir a Cristian Romero que aún arrastra molestias físicas tal y como quedó patente en el choque ante Arabia Saudí. Lisandro Martínez sería su recambio.
Vuelve a quedar en el aire el lugar habitualmente ocupado por Giovani Lo Celso. Fue Alejandro Papu Gómez el que se situó en su lugar ante Arabia Saudí. No convenció y el entrenador maneja posibilidades con Enzo Fernández o Alexis Mac Allister que sonó con fuerza ya para el anterior partido. Rodrigo de Paul y Leandro Paredes son fijos.
En el ataque no hay dudas a pesar de la irrupción de Julián Álvarez. Ángel Di María y Lautaro Martínez acompañarán a Leo Messi.
La selección del ‘Tata’ Martino llega al duelo trascendental contra Argentina con la sensación de haber aparcado las continuas críticas sobre el equipo y también de la figura del técnico, que ponderó el ambiente vivido en el Estadio 974 e invitó a que su afición mantenga el espíritu en el partido contra la albiceleste, su selección de nacimiento, y a la que podría dar la estocada final.
Un partido para el que el seleccionador ha probado diferentes alternativas. Atrás, se plantea la defensa de cinco jugadores, con Edson Álvarez retrasado, tal y como destacó en su labor frente a Polonia con el impecable marcaje sobre Robert Lewandowski, escoltando a Héctor Moreno y a César Montes.
La otra duda que mantiene Martino es saber quién ocupará la posición de ‘9’. Raúl Jiménez, quien jugó 20 minutos en el estreno, todavía está falto de ritmo competitivo tras jugar solo cuatro partidos esta temporada con el Wolverhampton, mientas que Henry Martín no aprovechó su salida de inicio frente a Polonia.
Descartada, a priori, la opción de Rogelio Funes Mori, el ‘Tata’ también ha manejado jugar con falso ‘9’, en una posición que podría ocupar el siempre aclamado por su afición Hirving ‘Chucky’ Lozano.
— Alineaciones probables:
Argentina: Emiliano Martínez; Gonzalo Montiel, Nicolás Otamendi, Lisandro Martínez, Marcos Acuña; Rodrigo De Paul, Leandro Paredes, Enzo Fernández; Ángel Di María o Julián Álvarez, Lionel Messi y Lautaro Martínez.
México: Guillermo Ochoa; Jorge Sánchez, César Montes, Edson Álvarez, Hector Moreno, Jesús Gallardo; Uriel Antuna, Héctor Herrera, Luis Chávez, Alexis Vega; y Hirving Lozano
Árbitro: Daniele Orsato (ITA)
Estadio: Luisail
Hora: 22.00 hora local; 19.00 hora GMT.
Santiago Aparicio y Óscar Maya Belchí