Naciones Unidas, 21 de diciembre de 2022.- El jefe de los servicios humanitarios de la ONU, Martin Griffiths, advirtió este miércoles que Siria sufre la mayor degradación socio económica desde el comienzo en 2011 de la crisis que derivó en una guerra civil y pidió a los países que aumenten sus contribuciones financieras para enviar ayuda humanitaria a millones de sirios.
En una comparecencia ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, Griffiths detalló que la gran mayoría de las familias sirias están luchando o son incapaces de satisfacer sus necesidades básicas alimentarias, especialmente aquellas familias encabezadas por mujeres.
Los precios de los productos de la canasta básica han subido más de un 90 % este año, más de 12 millones de sirios -más de la mitad de la población- sufren por llevar comida a la mesa y el número de personas que necesitan ayuda humanitaria ha pasado de 13,4 millones a 14,6 millones.
«Se espera que esta cifra alcance los 15,3 millones en 2023», dijo el responsable de la ONU antes de subrayar: «Temo que 2023 no traerá mucho alivio al pueblo sirio».
Entre enero y noviembre, según datos de la ONU, 138 civiles han muerto y otros 249 han resultado heridos en los combates entre las partes.
Además, el país ha sufrido un brote de cólera -el primero en 15 años- que ha afectado a por lo menos 62.000 personas, de las cuales 100 han fallecido.
«Necesitamos con urgencia fondos adicionales para continuar respondiendo al brote, así como suministros médicos, apoyo a los laboratorios y capacitación para los trabajadores sanitarios», subrayó Grffiths, que también aludió a los rigores del invierno y a la ayuda necesaria para atender las necesidad urgentes de seis millones de personas, un 33 % más que el año pasado.
Ante esta sombría situación, el jefe humanitario hizo hincapié en que el Plan de Respuesta Humanitaria de 2022 sólo ha recaudado un 43 % de los fondos presupuestados, lo que Griffiths calificó como un hecho «sin precedentes».
«Millones de personas cuentan con su apoyo, ahora más que nunca» dijo dirigiéndose a los 15 países reunidos en el Consejo de Seguridad.
EFE