El Cairo, 28 ene – Los Cascos Blancos y el grupo opositor Coalición Nacional Siria acusaron al Ejército sirio de cometer crímenes de guerra tras conocer el último informe de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) que confirmó ayer viernes el uso de armas químicas en la localidad de Duma en abril de 2018 y que mató, al menos, a 43 personas.
En este sentido, los denominados Cascos Blancos, un grupo de rescatistas que operan en las áreas del país en manos de la oposición, señalaron a través de su cuenta oficial de Twitter que «el tercer informe del Equipo de Investigación e Identificación (ITT en inglés) de la OPAC confirmó el uso de gas de cloro venenoso por parte del régimen de (Bachar) Al Asad en el ataque químico de 2018 contra Duma».
Este equipo de socorristas detalló que, según el informe, «al menos un helicóptero perteneciente al régimen de Al Asad arrojó dos cilindros que contenían gas de cloro tóxico sobre dos edificios de apartamentos en un área poblada por civiles en la ciudad de Douma, matando a 43 civiles e hiriendo a decenas más».
Además, apuntaron que, en su momento, los Cascos Blancos «prestaron auxilio a los heridos» y sus equipos especializados «documentaron la evidencia y recolectaron muestras de acuerdo con los estándares más altos y las enviaron a la OPAC» como prueba del «compromiso de la organización para luchar contra la injusticia que padecen las víctimas».
Por su parte, la Coalición Nacional Siria (CNFROS), la principal alianza opositora en el exilio con su actual sede en Turquía, emitió un comunicado en el que pone «a la comunidad internacional ante la responsabilidad de eliminar la amenaza de este régimen que el pueblo sirio sufre y que ha sido objeto de varios tipos de asesinatos y violaciones a manos del régimen de Al Asad y sus aliados».
Esta organización, constituida en Catar en 2012 y actualmente presidida por el sirio Salem al Meslet, hizo un llamamiento para «responsabilizar al régimen de Al Asad, implementar la Resolución 2118 (2013) del Consejo de Seguridad e imponer medidas contra el régimen en virtud del Artículo 7, de acuerdo con el Artículo 21 de la mencionada resolución».
Desde CNFROS exigen la aplicación de estas medidas «especialmente después de varias investigaciones realizadas por organizaciones internacionales imparciales que probaron la responsabilidad del régimen de Al Asad por lanzar ataques con armas químicas contra el pueblo sirio».
Pese a la publicación del informe de la OPAQ y las reacciones de estos grupos opositores, el gobierno de Siria no ha emitido ningún comunicado al respecto a través de sus canales oficiales hasta el momento.(EFE).