Asunción, 1 de agosto del 2023 – Los paraguayos recordaron este martes a las 364 personas que fallecieron como consecuencia de un devastador incendio ocurrido en 2004 en el conocido supermercado Ycuá Bolaños, de Asunción, convertido en la actualidad en un memorial que busca arrancar del olvido a las víctimas de una de las mayores tragedias de Paraguay.
En medio de fotografías, lágrimas y sollozos, los familiares y amigos de las víctimas visitaron el lugar en donde ocurrió este hecho, para rendir tributo -como cada año- a los fallecidos, heridos y desaparecidos.
Una enorme bandera de Paraguay extendida en la entrada de lo que fue el estacionamiento de este antiguo supermercado, formó una suerte de recorrido de varios metros en donde decenas de personas se situaron desde muy temprano.
La mayoría esperó hasta las 11.20 hora local (15.20 GMT) -horario en el que se recuerda que comenzó la fatídica emergencia- antes de retirarse.
Justo a esa hora, el sonido de las sirenas de varios camiones de bomberos silenció un acto ecuménico programado e interrumpido solo por el ocasional suspiro entrecortado de quienes aún revivían el doloroso recuerdo.
Un grupo de bomberos tuvo que asistir a una señora que se desmayó en medio del ulular de sirenas.
Luego de casi dos décadas de la tragedia que conmocionó a todo el país y a la región, la remembranza de aquel día aún perdura en la memoria colectiva de los paraguayos.
La señora Ángela Gabriela Pucón contó a EFE que perdió a sus dos hijas, de 22 y 29 años, en aquella tragedia. Un día que, según sus palabras, desea no recordar.
«Esto era un loquero totalmente, la gente de aquí para allá. La ambulancia, las lágrimas, el humo», dijo Pucón.
Aquel día, Ruth Pereira (26) y su hijo Jesús Ledezma (4), fallecieron dentro del supermercado y dejaron una «huella para siempre» en la memoria de su familia, comentó a EFE Liliana Pereira, hermana de la víctima.
«Venir acá, a este lugar, es como revivir todo ese momento», añadió.
Algunos de los familiares y amigos de la víctimas se reúnen en este lugar cada lunes, desde hace 19 años, señaló a EFE Cristian Olmedio, quien forma parte de la ONG Coordinadora de familiares, víctimas y personas amigas de afectados por Ycuá Bolaños.
Olmedo, quien perdió a su hermana y su sobrina como consecuencia del incendio, agregó que el Ycuá Bolaños «no es solamente dolor», es también «la exigencia a las instituciones sobre el tema de prevención de incendios».
Para el ministro de la Secretaría Nacional de Cultura, Rubén Capdevilla, los 1 de agosto «siempre son días dolorosos» en Paraguay.
«Hoy encontramos a las familias más unidas, más consolidadas, y por supuesto, más empoderadas de este lugar, que es un lugar hecho a la memora de esas personas desaparecidas», expresó Capdevilla a EFE.
El incendio del supermercado Ycuá Bolaños, que dejó a más de 200 heridos, se inició en la chimenea de la parrilla de un restaurante del establecimiento, debido a la falta de mantenimiento, según la pericia.
Tras un largo y controvertido proceso judicial, el propietario del local, Juan Pío Paiva, y su hijo, Víctor Daniel Paiva, fueron condenados en 2009 a 12 y 10 años de prisión, respectivamente, mientras que un guardia del supermercado fue condenado a 5 años por homicidio doloso.
EFE