• La nueva tubería es más flexible y tiene mayor durabilidad, lo que minimiza los tiempos de mantenimiento y el riesgo de daños
• La reposición de redes de acueducto y alcantarillado es una inversión posible gracias al pago oportuno de los servicios públicos por parte de los clientes
• Actualmente se encuentran trabajando simultáneamente cerca de 60 frentes de obra
Medellín, jueves 14 de septiembre de 2023 (@epmestamosahi) | Un ambicioso plan de modernización de redes de acueducto y alcantarillado realiza EPM en el Valle de Aburrá y Rionegro, se busca alcanzar la modernización de 100% al terminar este 2023. En una primera fase, se programó la reposición de 167 kilómetros de tuberías que fueron construidas en la década de los 60 y que ya cumplieron su vida útil. A la fecha, se han modernizado 93 kilómetros con una inversión de $224 mil millones.
A este propósito se sumó el cambio de redes que deben ser redimensionadas para atender las nuevas necesidades que genera el crecimiento demográfico, ya sea porque hay más demanda de agua potable y saneamiento o porque han aumentado los caudales debido a los efectos del cambio climático; también, se incluyó en esta inversión la reposición de tuberías que han tenido daños.
El proyecto de manera complementaria también prevé una segunda fase que iniciará el segundo semestre del 2024 y se extenderá hasta el 2027, con una inversión adicional de aproximadamente $350 mil millones.
Bienestar para la comunidad
Jorge Andrés Carrillo Cardoso, gerente general de EPM, destacó el impacto que tiene este tipo de inversiones, “lo que hacemos es fundamental en los municipios porque genera mayor bienestar a las personas, se garantiza mayor continuidad del servicio al reducirse los daños y tiempos de mantenimiento”.
Otras de las bondades de la modernización de redes se relacionan con el ambiente que también se beneficia porque hay una mayor eficiencia en el transporte de las aguas residuales, se evitan inundaciones en temporadas de lluvia y se aporta a la limpieza de las quebradas.
Hoy, de los 9.350 kilómetros de tubería que suman las redes de acueducto y alcantarillado que opera EPM en el Valle de Aburrá y Rionegro, el 97% ya cuenta con tuberías modernas, que se destacan por ser construidas con materiales amigables con el ambiente, resistentes y flexibles como el polietileno de alta durabilidad y resistencia.
Concertar para disminuir impacto en vías
Uno de los retos más importantes que tiene esta inversión es la mitigación de los impactos a los usuarios de las vías y los vecinos de los lugares donde se construye la obra, hoy se encuentran activos más de 60 frentes de obra, repartidos en todos los municipios del Valle de Aburrá y Rionegro, por ese motivo EPM implementa la tecnología sin zanja para reducir los cierres de vía, el material particulado y el ruido.
En los casos donde no se puede aplicar esta tecnología por razones geológicas o técnicas, la articulación con las administraciones municipales, las comunidades y los transportadores es clave, por eso EPM implementa mesas de trabajo para llegar a acuerdos que serán implementados durante la ejecución.
Mejorar la infraestructura para garantizar la calidad y continuidad del servicio de acueducto y alcantarillado, utilizar materiales amigables con el ambiente y trabajar por aumentar la cobertura para los nuevos usuarios, es una labor con la que EPM contribuye a la armonía de la vida para un mundo mejor.