Bogotá, 15 enero de 2024.- En un trágico y violento suceso, el firmante de paz José Enrique Roa Cruz ha sido secuestrado, y sus dos escoltas de la Unidad Nacional de Protección (UNP), Luis Eduardo Sterling y Yilber Silva, han sido asesinados en la zona rural del municipio de Pitalito, Huila. Este preocupante incidente se produjo la noche del 14 de enero de 2024, desencadenando una ola de consternación y exigencias de justicia.
Los hechos se desarrollaron aproximadamente a las 18:30 horas en el corregimiento de Guacacallo, donde Roa y su equipo de protección asistían a una reunión. Según los informes, un grupo armado, presuntamente perteneciente al frente Ismael Ruiz del comando central del EMC, atacó al grupo, hiriendo a Roa y a uno de los escoltas antes de secuestrarlos. Los cuerpos de Sterling y Silva fueron hallados más tarde cerca del puente de la quebrada El Guayabo, mostrando signos de tortura.
Pablo Catatumbo, senador del partido Comunes, expresó su consternación y urgencia en la búsqueda de Roa, además de solicitar un refuerzo en las medidas de seguridad para los firmantes del Acuerdo Final de Paz. Asimismo, instó a la Fiscalía a capturar a los responsables de estos hechos.
La CSIVI, que repudió el acto y exigió una respuesta inmediata del gobierno colombiano, informó que Roa era el enlace territorial CSIVI en Huila y que tanto él como su escolta resultaron heridos antes de ser secuestrados.
Este incidente ocurre en un contexto delicado, dado que el Gobierno y el EMC están en medio de diálogos de paz, con el tercer ciclo de negociaciones en curso en Bogotá.
Según datos del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), en 2023 se registraron 44 asesinatos de firmantes del Acuerdo de Paz, una cifra ligeramente menor a los 50 ocurridos en 2022, resaltando la continua vulnerabilidad de los firmantes de paz en Colombia.
A.U.
Con información de EFE.