Bogotá, 8 feb- El embajador de Colombia en Estados Unidos, Luis Gilberto Murillo, fue designado por el presidente Gustavo Petro como canciller encargado, en sustitución de Álvaro Leyva, suspendido por la Procuraduría por tres meses por presuntas irregularidades en una licitación para contratar la fabricación de pasaportes.
La medida la tomó el jefe de Estado en un decreto firmado este jueves en el que también aclara que Murillo seguirá al frente de la Embajada en Washington y paralelamente asumirá las funciones de Leyva.
Leyva fue suspendido el pasado 24 de enero por la Procuraduría General (Ministerio Público) del cargo de ministro de Relaciones Exteriores, pero el funcionario continuó ejerciendo sus funciones hasta ayer, e incluso firmó decretos de nombramientos en embajadas.
Incluso el pasado lunes, Leyva, muy cercano a Petro, se reunió en Bogotá con altos funcionarios estadounidenses, entre ellos el consejero principal adjunto de Seguridad Nacional de EE.UU., Jon Finer.
Las críticas por el desacato a la decisión del Ministerio Público no solo se dirigieron a Leyva sino también a Petro, para quien esta resolución es una maniobra para poner trabas a un «Gobierno popular, democrático».
«Si alguien se va, sigue otro u otra. El siguiente va a ser reemplazado, tiene que ser seguido por alguien mejor», indicó el mandatario tras conocerse la decisión.
Leyva, por su parte, publicó el miércoles un comunicado en el que dijo: «Informo que acato la decisión separándome del ejercicio de las funciones».
También aseguró que siguió en el cargo porque consideraba que la Procuraduría tenía que enviar su decisión a Petro para que fuera el presidente quien «diera cumplimiento a la medida de suspensión provisional».
Quién es Murillo
Murillo, de 55 años, es ingeniero de Minas de la Universidad Estatal de Moscú. Fue gobernador del departamento del Chocó (1997-1999, 2012-2013) y ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible entre 2016 y 2018, durante el Gobierno de Juan Manuel Santos.
Hace ya unos años tuvo que refugiarse con su familia en Estados Unidos después de ser secuestrado por paramilitares, y en ese país trabajó en organismos como el Banco Mundial (BM), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Investigación administrativa
En septiembre pasado, la Procuraduría abrió una investigación contra Leyva y contra el secretario general de la Cancillería, José Antonio Salazar, por irregularidades en la anulación de la licitación para expedir los pasaportes.
La Cancillería indicó entonces que esa decisión fue tomada porque, según otras empresas interesadas en la licitación, no existe libre competencia, ya que en los últimos 17 años la misma firma, Thomas Greg & Sons, se ha encargado de producir los pasaportes y etiquetas de visado colombianas.
Ante estas sospechas, la Cancillería suspendió la audiencia de adjudicación en la que se iba a definir si la licitación seguía en poder de Thomas Greg &Sons o si por el contrario se declaraba desierta por la falta de oferentes.
Sin embargo, el 2 de octubre, Leyva dijo en un comunicado que «se recurrió a la figura de urgencia manifiesta» para prolongar el contrato en cuestión, mientras se hacía «la convocatoria de manera inmediata a una nueva licitación plenamente garantista» para evitar retrasos en la expedición de esos documentos de viaje.
EFE