Filipinas dice que las acciones de China «no ayudan a generar confianza» en mar en disputa

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Daños en el casco de un barco de la Guardia Costera de Filipinas tras el choque registrado el lunes con un navío de los guardacostas chinos en el disputado mar de China Meridional. HANDOUT EDITORIAL USE ONLY/NO SALES

Bangkok, 20 de agosto de 2024.- El Gobierno de Filipinas remarcó este martes que las acciones de guardacostas chinos «no ayudan a generar confianza» en el mar de China Meridional, donde las reclamaciones territoriales de ambos países se solapan, a raíz de la denuncias cruzadas por el choque de barcos registrado el lunes.

«Filipinas urge a China a abstenerse de realizar acciones agresivas (…) Expresamos nuestra seria preocupación por el acoso deliberado y la violación china de la soberanía filipina», apuntó en rueda de prensa Alexander Lopez, portavoz del Consejo Marítimo Nacional.

En la madrugada del lunes se registraron dos choques entre barcos de la Guardia Costera de China y Filipinas, lo que causó daños en el casco de una de las embarcaciones de Manila, en aguas cercanas al Atolón Sabina (que Filipinas llama Escoda; y China, Xianbin Jiao), ubicado en las disputadas Islas Spratly del mar de China Meridional.

A raíz del incidente, Manila y Pekín se acusaron mutuamente de realizar maniobras «ilegales y peligrosas» que derivaron en el accidente.

«Estas acciones ilegales no ayudan a generar la confianza necesaria para mejorar la relación bajo el principio de respeto mutuo y un orden internacional basado en leyes», remarcó Lopez al asegurar que China miente al acusar a Filipinas del incidente.

A finales de julio, ambas naciones llegaron a un acuerdo para reducir las tensiones en torno a las zonas en conflicto en el mar de China Meridional que atañe a tareas de suministro y las rotaciones del contingente filipino en la región.

Lopez defendió que el acuerdo es «útil para crear entendimiento» y reafirmó que Manila permanece «comprometida a la alcanzar una solución pacífica de las disputas (territoriales) a través de canales diplomáticos».

El representante filipino también aseguró que a pesar de este incidente los guardacostas de su país continuarán con las actividades marítimas y la protección de las aguas que consideran de su jurisdicción.

El atolón Sabina se encuentra a menos de 200 millas de la isla filipina de Palawan, por lo que conforme a las leyes internacionales se encuentra dentro de la Zona Exclusiva Económica de Filipinas. Una posición ratificada en 2016 por un laudo el Tribunal Permanente de Arbitraje, en La Haya, en una decisión que China rechaza.

Este incidente es el último de una serie de crecientes tensiones entre ambos países en el mar de China Meridional, una estratégica zona clave para el tránsito del comercio marítimo mundial y que cuenta con yacimientos de hidrocarburos y ricos bancos de pesca.

China reclama la práctica totalidad del mar de China Meridional al argumentar supuestos derechos históricos, una reivindicación soberanista que también choca con las posiciones de otros países como Vietnam, Malasia y Brunéi, además de la isla autogobernada de Taiwán.

EFE