Bogotá, Colombia, 24 agosto de 2024.- El plazo que la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) le dio al Gobierno colombiano para destrabar las negociaciones de paz culmina este viernes sin que se avizore una solución para la crisis que vive la mesa de diálogos, que está en un estado de congelamiento desde mayo.
Luego de que finalizara el cese al fuego bilateral el pasado 3 de agosto sin que fuese renovado, el ELN manifestó su «disposición» de esperar hasta hoy a que el Gobierno colombiano publique un decreto para retirar a esa guerrilla de la lista de grupos armados organizados (GAO).
Sin embargo, fuentes de ese grupo armado aseguraron hoy a EFE que están a la espera de un pronunciamiento del Gobierno y que quizás los líderes de la guerrilla se manifiesten, por lo que aseguraron que por ahora persistirá el «congelamiento» de las negociaciones.
Tire y afloje
La incertidumbre ha marcado la hoja de ruta de las negociaciones en las últimas semanas, en las que ha habido un tire y afloje de las partes sin avances concretos públicos.
El Gobierno, que apuesta a mantenerse en la mesa de negociaciones a como dé lugar, presentó a la guerrilla una «propuesta confidencial» para avanzar en los diálogos.
Sin embargo, el ELN aseguró que el ofrecimiento, que luego el presidente Gustavo Petro reveló que está relacionado con una «reforma económica», no es necesario en este momento en las negociaciones de paz, pues la guerrilla cree que se requiere de «franqueza y claridad al país».
«Tampoco se nos puede ofrecer algo que ya está acordado y menos dilatar el cumplimiento de los acuerdos», señaló el ELN.
Ante esta situación, el senador de izquierdas Iván Cepeda, que hace parte del equipo negociador, expresó que «el ELN tiene que decirle al país ahora qué hacer», pues el Gobierno ha sido «claro» y sus «posiciones han sido absolutamente transparentes».
«Se habla de incumplimientos, pero el peor de los incumplimientos, hay que decirlo aquí, es haber congelado la mesa. Ese es un incumplimiento flagrante de nuestro compromiso y más ad portas de renovar el cese al fuego. No hay argumento que consideremos válido para esa actitud de suspensión, dilación de las conversaciones», añadió el senador la semana pasada.
Reclamos de la guerrilla
En mayo pasado ese grupo guerrillero puso cuatro condiciones para seguir en la mesa: retirada del ELN de la lista de grupos armados organizados (GAO), materialización de un fondo para financiarse a cambio de cesar el secuestro extorsivo, suspensión de los acercamientos del Gobierno al frente Comuneros del Sur (una escisión de la guerrilla) y el fin de las operaciones ofensivas de las fuerzas de seguridad del Estado.
La jefa del equipo negociador del Gobierno, Vera Grabe, señaló la semana pasada que «el ELN ha respondido de manera pública, ha planteado reclamos al Gobierno de incumplimientos que no son ciertos».
Por ahora, la crisis de la mesa de negociaciones se mantiene, a la espera de que los diálogos entre el Gobierno y la guerrilla lleven a una salida del congelamiento y a retomar el cese al fuego bilateral.
EFE