Bogotá, 28 ago – Las Fuerzas Militares abatieron a cuatro integrantes del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en el desarrollo de operaciones en una zona rural del departamento de Norte de Santander, en la frontera con Venezuela, que se producen menos de un mes después de que finalizara el cese al fuego con la guerrilla.
Las operaciones, llevadas a cabo por la Fuerza Aérea y el Ejército, fueron realizadas entre los municipios de Bucarasica, Ábrego y Sardinata, y acabaron con cuatro integrantes del ELN y uno más resultó herido y está siendo atendido en Cúcuta (capital de Norte de Santander), informó el Ejército este miércoles en un comunicado.
«Gracias a información de inteligencia militar, se habría ubicado a un grupo de sujetos pertenecientes al Frente Juan Fernando Porras Martínez», apuntó el Ejército, quien aseguró que estas personas se dedicaban «a generar zozobra en la región con actividades delictivas como recolección de dineros producto del narcotráfico, extorsiones, acciones contra la población civil, ataques contra la Fuerza Pública (…), entre otras».
Además, este frente del ELN, según el Ejército, «sería el responsable del reclutamiento y entrenamiento de jóvenes, para conformar este grupo y atentar contra la población civil y la Fuerza Pública».
En la operación también se incautaron cuatro fusiles, «abundante material de guerra, intendencia, comunicaciones, explosivos y pañoletas y brazaletes alusivos al ELN».
Por su parte, en Convención, otro municipio de Norte de Santander, el ELN abatió con un francotirador a un soldado, «en represalia por la presencia institucional», según informaron las Fuerzas Militares.
Esta operación militar se produce después de que el pasado 3 de agosto finalizara el cese al fuego bilateral entre la guerrilla y el Gobierno que duró un año y que no ha sido renovado por la crisis que pasan actualmente las negociaciones de paz.
En mayo pasado ese grupo guerrillero puso cuatro condiciones para seguir en la mesa: retirada del ELN de la lista de grupos armados organizados (GAO), materialización de un fondo para financiarse a cambio de cesar el secuestro extorsivo, suspensión de los acercamientos del Gobierno al frente Comuneros del Sur (una escisión de la guerrilla) y el fin de las operaciones ofensivas de las fuerzas de seguridad del Estado.
La jefa del equipo negociador del Gobierno, Vera Grabe, señaló la semana pasada que «el ELN ha respondido de manera pública, ha planteado reclamos al Gobierno de incumplimientos que no son ciertos».
Por ahora, la crisis de la mesa de negociaciones se mantiene, a la espera de que los diálogos entre el Gobierno y la guerrilla lleven a una salida del congelamiento y a retomar el cese al fuego bilateral.
EFE