Pekín, 9 de septiembre de 2024.- El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, insistió este lunes en la necesidad de una solución negociada ante las tensiones arancelarias entre la Unión Europea y China porque «una guerra comercial no beneficiaría a nadie».
Sánchez hizo esta advertencia en la reunión que mantuvo en Pekín con el Consejo Asesor Empresarial de ambos países, del que forman parte 22 firmas españolas y 21 chinas.
Un encuentro posterior a su intervención en la inauguración del IX Foro España-China, que fue el primer acto de su agenda en la visita que realiza al país asiático y en el que apeló a dialogar y lograr soluciones consensuadas para resolver problemas comunes en medio de las tensiones arancelarias entre China y la Unión Europea.
Pekín anunció en junio una investigación ‘antidumping’ (competencia desleal) contra ciertas importaciones de carne de cerdo y derivados procedentes de la Unión Europea, una respuesta a los aranceles de Bruselas a los vehículos chinos.
Eso podría afectar especialmente a España debido a que es el principal exportador de cerdo a China entre todos los países de la UE.
Sánchez no se refirió explícitamente a esas tensiones arancelarias en la inauguración del foro, pero sí lo hizo ante los empresarios chinos y españoles, a los que dijo que las actuales tensiones comerciales suponen un gran desafío.
«Medidas como la imposición de aranceles adicionales a los vehículos eléctricos chinos suponen un reto para todos», señaló Sánchez, quien garantizó que España trabajará por una solución negociada y acordada en el marco de la Organización Mundial del Comercio.
Una solución que cree que debe ayudar a crear una mayor igualdad de condiciones y a fomentar el desarrollo de la industria europea en colaboración con las empresas chinas del sector.
«Una guerra comercial no beneficiaría a nadie. En este entorno -apostilló- es vital que España y China mantengamos un diálogo constructivo y fundado en el respeto mutuo».
En la reunión, celebrada en la sede del Banco Industrial y Comercial de China, Sánchez resaltó que este Consejo Asesor es una clara manifestación del compromiso mutuo por reforzar y profundizar en las relaciones entre China y España en un momento crucial para la economía mundial y de los dos países.
Eso es lo que explicó que pretende en este viaje, aumentar los intercambios económicos y, sobre todo, evitar restringirlos.
Añadió que su Gobierno tiene la firme voluntad de aumentar la presencia de empresas españolas en China y de dar un impulso a las relaciones entre los dos países, al tiempo que afirmó estar decidido a atraer más inversiones chinas de calidad a España.
En ese contexto de colaboración comentó que hay retos a los que enfrentarse, entre los que citó, además de las tensiones arancelarias, el profundo desequilibrio comercial entre España y China.
Por ello se puso como objetivo fomentar una relación equilibrada fundamentada en el respeto y la reciprocidad y que beneficie a ambos países.
A la reunión asistieron por parte española representantes de las empresas Alsa, Grupo Antolín, BBVA, Cepsa, Denodo, Gestamp, GRI Renewable Industries, Grupo Jorge, Isdin, La Liga, Mondragón, Nicolás Correa, Osborne, Roca y Técnicas Reunidas, además de dirigentes de la CEOE y de la Cámara de Comercio de España.
Esta fue la segunda reunión de este Consejo Asesor Empresarial, que mantuvo su primer encuentro en Madrid en 2018 durante la visita del presidente chino, Xi Jinping.
EFE