Proyecto ConexiónLab apunta a reducir la brecha digital en Bolivia

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Fotografía del 9 de septiembre de 2024 de izquierda a derecha Sandra Mamani, Sergio Basco, Adriana Ramos y Rodrigo Quispe durante una entrevista con EFE en La Paz (Bolivia). EFE/Gabriel Márquez

La Paz, 21 sep – El manejo de herramientas tecnológicas, programas, aplicaciones y redes sociales es parte del aprendizaje de jóvenes de zonas periurbanas y rurales de Bolivia mediante un proyecto que busca ampliar sus oportunidades de empleo y acortar brechas entre el campo y la ciudad, y entre hombres y mujeres.

ConexiónLab es el proyecto puesto en marcha por la organización Conexión ICCO América Latina con apoyo del BID LAB, el brazo de innovación y capital emprendedor del Grupo Banco Interamericano de Desarrollo, que desde 2022 hasta el momento ha beneficiado a 7.107 jóvenes en Bolivia.

«La idea es capacitar a 8.000 jóvenes en habilidades digitales para que también puedan tener mayores oportunidades de empleo y emprendimiento», dijo a EFE la directora regional de Conexión ICCO, Conny Toornstra.

Según Toornstra, la organización emprende distintos programas en Centroamérica, Colombia y Bolivia dirigidos a jóvenes en situaciones vulnerables o de escasos recursos.

«Este proyecto nació porque hemos visto que en el área rural y periurbana hay muchas oportunidades para los jóvenes, pero hay que apoyar para que se pueda ver estas oportunidades», y para eso «necesitan también tecnología», señaló.

La entidad vio además «que hay una brecha enorme entre posibilidades y tecnología en el área periurbana y rural», con problemas como la conectividad o el acceso a equipos informáticos y por esto decidió apoyar a jóvenes de esas zonas, en especial a indígenas y mujeres, agregó.

Habilidades digitales

El responsable de Soluciones Digitales de ConexiónLab, Sergio Basco, explicó a EFE que lo que se busca con el proyecto es «brindar herramientas para que los jóvenes puedan acceder a diferentes oportunidades económicas, digitales y de empoderamiento».

«Y que, de esta manera, puedan potenciar las regiones rurales donde viven y tener mayores oportunidades para emprender, trabajar o para conectarse con otros jóvenes dentro de sus regiones, en el país o incluso a nivel regional», indicó.

El proyecto se centra en la ciudad de El Alto, vecina de La Paz, el norte de la región andina de Potosí y la zona del Chaco en el departamento sureño de Tarija, precisó.

Los jóvenes reciben capacitaciones en habilidades digitales básicas, como el uso de la plataforma de diseño Canva o la de edición CapCut, y aplicaciones como Facebook o WhatsApp Business.

También hay un nivel medio en el que aprenden sobre mercadeo digital y «tester manual de software» y está la formación avanzada con capacitaciones para el desarrollo de páginas web, diseño UX y ciencia de datos.

La formación se complementa con el ‘Ecosistema Digital’, una plataforma para el acceso a educación, empleo y emprendimiento, y la Comunidad Digital JunteX, que apunta al «empoderamiento económico» de los jóvenes fomentando el desarrollo de relaciones profesionales.

ConexiónLab también promueve la campaña ‘Tu laptop, su futuro’, para recolectar computadoras portátiles usadas en buen estado para distribuirlas entre los beneficiarios del proyecto, que acceden a los cursos gratuitamente.

Algunas experiencias

Uno de los becarios fue Rodrigo Quispe, un estudiante de informática de 24 años que vive en el barrio Pasankeri, en los lindes entre La Paz y El Alto, quien aseguró a EFE que su experiencia «ha sido bastante satisfactoria» porque pudo mejorar sus habilidades y su perfil profesional, y aprendió «a trabajar en equipo».

Según Quispe, «el conocimiento se ha hecho para compartir, porque si no lo compartimos se queda ahí y no avanzamos», y por esto ahora brinda ayuda a otros muchachos de su universidad a partir de lo aprendido en ConexiónLab.

Sandra Mamani, una estudiante de administración de empresas de 26 años, contó a EFE que con el proyecto decidió que quiere enfocarse en el área de mercadeo y que pudo desarrollar habilidades como la gestión de redes sociales y la edición de video que ahora compartirá con sus familiares.

Mamani, que vive en El Alto, destacó que ConexiónLab muestre que el área informática no es sólo «para varones», como tradicionalmente se piensa.

«Con estas capacitaciones, nos enseñan que no es difícil y no es sólo para un género. Y por eso también siento que nos incluyen más a las mujeres», resaltó.

Adriana Ramos, una docente de informática de 24 años, dijo a EFE que estar en el proyecto le ayudó a ampliar sus conocimientos, mantenerse «actualizada» y compartir lo aprendido con sus estudiantes.

Gina Baldivieso

EFE