Insultan y lanzan barro a la comitiva de los reyes de España en el epicentro del temporal

202
El rey Felipe rodeado por vecinos indignados, durante su visita a Paiporta este domingo, epicentro de las inundaciones de Valencia. Gritos de "fuera", así como lanzamiento de barro, recibieron a la comitiva de los reyes de España, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente regional de Valencia, Carlos Mazón. EFE/Biel Aliño

Valencia (España), 3 nov – Gritos de «fuera», así como lanzamiento de barro, recibieron a la comitiva de los reyes de España, Felipe VI y Letizia, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente regional de Valencia, Carlos Mazón, a su llegada a Paiporta, epicentro de las inundaciones que asolaron esa provincia el martes.

Decenas de voluntarios y vecinos indignados recibieron con insultos a la comitiva y se encararon con ella, con gritos de «fuera, fuera», mientras que tanto el rey como la reina intentaron mediar con jóvenes que se les acercaron, en un pueblo donde ha habido al menos 62 muertos por las inundaciones, que provocaron 213 fallecimientos en la provincia, así como un número indeterminados de desaparecidos en el mayor desastre natural en España en lo que va de siglo.

El rey Felipe VI habla con vecinos de Paiporta, epicentro de las inundaciones, durante su visita este domingo a esta localidad valenciana, donde él y su comitiva, con la reina, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente regional de Valencia, Carlos Manzón, fueron recibidos con gritos de «fuera». EFE/Biel Aliño

Con la cara manchada de barro, igual que su abrigo, el rey siguió avanzando por una de las calles principales de esta localidad de la zona cero del temporal y trató de tranquilizar a varios de los voluntarios, muy alterados tras cinco días de desastre por la riada.

La reina también dialogó con algunos de los indignados, mientras que seguían los gritos de «fuera, fuera» y algunos insultos dirigidos a todas las autoridades.

Aunque en un principio la seguridad comenzó a abrir paraguas para evitar la caída de barro a la comitiva, posteriormente los cerraron mientras que el rey seguía caminando y deteniéndose a hablar con los voluntarios y vecinos alterados.

EFE