Sarmiento afirma que Odebrecht le ocultó información al Grupo Aval

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El presidente del Grupo Aval, Luis Carlos Sarmiento Gutiérrez, declaró este jueves 21 de febrero en el juicio contra el expresidente de Corficolombiana José Elías Melo Acosta y dijo que, incluso después de diciembre del 2016, cuando ya era público que Odebrecht había pagado sobornos en distintos países, los directivos de la constructora brasileña le negaron al Grupo Aval que algún soborno tuviera relación con Ruta del Sol, proyecto en el cual eran socios.

Sarmiento Gutiérrez llegó a las 8 de la mañana al Juzgado 14 de Conocimiento de Paloquemao, a donde fue citado por la defensa de Melo Acosta, quien está acusado por la Fiscalía de gestionar con el Departamento de Operaciones Estructuradas de Odebrecht un soborno por 6,5 millones de dólares para el exministro de Transporte Gabriel García Morales, para que los favoreciera con la adjudicación del contrato de Rutal del Sol.

El presidente del Grupo Aval señaló que solo en el 2017 tuvo conocimiento sobre el pago de los 6,5 millones de dólares hecho por Odebrecht al exviceministro García Morales, quien hoy está preso. Reiteró que apenas en diciembre del 2016 supieron de las actuaciones irregulares de Odebrecht.

“Nosotros vinimos a conocer de las actuaciones ilícitas de Odebrecht el 20 o 21 de diciembre (de 2016), cuando se publicó que había llegado a un acuerdo con el Departamento de Justicia americano (…), confesaban haber hecho el pago de 11 millones de dólares en Colombia y no decían a qué concesión se referían”, puntualizó Sarmiento Gutiérrez.

Señaló que después de ese hecho dio la orden de contactar a los ejecutivos de Odebrecht para que aclararan “de qué se trataba lo que habían confesado y para que nos aclararan si algo tenía que ver con Ruta del Sol”.

El presidente del Grupo Aval sostuvo que los ejecutivos de la brasileña habían salido del país por vacaciones y argumentaban, además, que el acuerdo con la justicia de los Estados Unidos era confidencial y no podían entregar información.

Sarmiento Gutiérrez señaló que apenas a mediados de enero del 2017 fue posible hablar con los representantes de Odebrecht y que ellos afirmaron que los sobornos estaban relacionados con giros desde Brasil, y que nada tenían que ver con la Ruta del Sol.

“Los convocamos a varias reuniones, convocamos una junta directiva, que no se pudo producir por falta de quórum. Solamente en enero del 2017 pudimos reunirnos con ellos, me refiero a los representantes de Episol, porque yo no estuve en ninguna de esas reuniones, y ellos dicen que son sobornos que se hicieron desde Brasil y que no tenían nada que ver con la concesionaria Ruta del Sol”, puntualizó Sarmiento Gutiérrez durante el juicio a Melo Acosta.

El directivo señaló que, a pesar de eso, él ordenó una auditoría interna a todas las personas del grupo, cuyos resultados se presentaron a la Fiscalía.

Esa auditoría, explicó, buscaba establecer “si alguna persona (del grupo) había conocido de los sobornos o se había lucrado de ellos”.

En el mismo juicio había declarado como testigo de la Fiscalía Rafael Eduardo Neira Torres, vicepresidente senior de la contraloría corporativa del Grupo Aval, quien aseguró: “No encontramos evidencias de que funcionarios de la empresa hubieran conocido de irregularidades o hubieran recibido dineros de (Odebrecht)”.

Sarmiento Gutiérrez dijo hoy que Odebrecht era el accionista mayoritario del consorcio, tenía el liderazgo de los gastos y que se le intentaron poner algunos controles pero que los hechos evidencian que fueron superados por la compañía de Brasil.

Indicó en su declaración que, al comienzo, la empresa brasileña era un buen socio pero que, en el 2015, la relación se deterioró porque encontraron que Odebrecht estaba haciendo contratos que no eran necesarios para la obra.

“Yo no tenía indicio alguno o algo que me pudiera hacer pensar que Odebrecht había participado en sobornos o coimas. En el 2015 habíamos detectado unos contratos que no parecían necesarios para la ejecución de la obra, pero nunca pudimos probar su irregularidad, y de hecho Odebrecht los defendió e hizo una investigación interna cuyo resultado fue que no eran irregularidades”, indicó Sarmiento Gutiérrez.

Así mismo sostuvo que a raíz de los reclamos que en su momento hicieron el fallecido controler de la concesionaria, Jorge Enrique Pizano, y Javier Germán Mejía, gerente contractual de Consol, se evidenció que la firma del Brasil había logrado evadir los controles establecidos para que los socios colombianos estuvieran al tanto del desarrollo de la obra y sus gastos.

“Desgraciadamente el liderazgo en la operación estaba al mando de los brasileños y si bien se habían implementado en el acuerdo de accionistas algunas salvaguardas para tratar de tener un conocimiento de todo lo que estaba pasando, lo que resultó evidente a raíz de reclamos que hicieron el doctor Jorge Enrique Pizano, que en paz descanse, y el doctor Javier German Mejía, lo que resultó evidente, es que inclusive los de Odebrecht habían ideado maneras de darle la vuelta a esas salvaguardas”, dijo.

Afirmó que en el 2015 se estableció que las personas encargadas de los controles apenas estaban sabiendo de los contratos al final de esos procesos, y “solo se enteraban o se alarmaban cuando ya se iban a hacer los pagos a las firmas contratadas”, por lo que se negoció, entre diciembre del 2015 y marzo del 2016, un cambio de esos procesos y se “firmó un acuerdo de transacción con Odebrecht para que se cambiara el gobierno corporativo. Quedó plasmado que tendríamos posibilidad de involucrarnos en las contrataciones”, subrayó el presidente del Grupo Aval.

La función de Melo
Sarmiento Gutiérrez sostuvo que para el 2009 ya era presidente del Grupo Aval y presidente de la junta directiva de Corficolombiana y del Banco de Bogotá. Y que para esa fecha estaban en marcha varios proyectos de inversión, como la licitación de la Ruta del Sol, Unipalma y la empresa de maderas Pizano.

Así mismo señaló que las decisiones y discusiones de las juntas directivas quedaron plasmadas en actas en las que se detalla el contenido de los temas tratados.

A las preguntas de la defensa de Melo Acosta y luego de que le presentaran el acta 1649 de Corficolombiana del 29 de julio de 2009, indicó que en esa junta directiva se presentó un resumen de los avances en el proyecto para la licitación de la Ruta del Sol, el presupuesto del costo de la licitación y en qué estado estaba ese proceso.

El directivo sostuvo que para la época se había firmado un memorando de entendimiento con Odebrecht, el cual tenía cláusulas de confidencialidad, exclusividad y participación de porcentajes en el consorcio.

Indicó que Odebrecht, que era una de las empresas más importantes en el mundo en temas de infraestructura y que por su experiencia había exigido tener la mayoría de la participación en el consorcio y liderar su desarrollo.

Añadió que para la época el presidente de Corficolombiana era José Elías Melo y que él venía trabajando en el memorando de entendimiento con Odebrecht, pero que no conocía con qué personas de la compañía del Brasil se reunía.

“No fui testigo de ninguna reunión que ocurriera entre Corficolombiana y los brasileños. Me correspondía a mí asegurarme de que se estuviera negociando un memorando de entendimiento en ese sentido, el doctor José Elías y funcionarios de mi propio equipo me mantenían enterado de lo que estaba pasando con esa negociación. Tengo que asumir que el doctor José Elías había asumido el liderazgo de esa negociación al interior de la corporación, pero como digo, no fui partícipe de ninguna de esas reuniones”, sostuvo Sarmiento Gutiérrez.

Agregó que Melo Acosta no recibió ninguna bonificación por la adjudicación de Ruta del Sol y que las decisiones sobre con quiénes se van a asociar se toman en las instancias de las juntas directivas. En este caso, indicó, “hasta donde yo recuerdo es más bien Odebrecht la que nos convida a ser sus socios”.

Tomado de El Tiempo