Medellín, Colombia, 16 noviembre de 2024.- Jorge Iván Duque Ríos, conocido como alias «Mi Sangre», señalado líder del grupo delincuencial El Diamante, falleció en la madrugada de este viernes en el Hospital General de Medellín. Duque Ríos permaneció 13 días en la Unidad de Cuidados Intensivos tras ser víctima de un atentado armado el pasado 2 de noviembre en el barrio Los Colores.
El ataque ocurrió a las 3:00 de la tarde en la calle 53 con carrera 71A, cuando dos hombres vestidos con uniformes de una empresa de telecomunicaciones interceptaron el vehículo en el que se movilizaba junto a su esposa. Los agresores dispararon en repetidas ocasiones, impactando a alias “Mi Sangre” en siete oportunidades. Aunque la otra víctima se encuentra estable, Duque Ríos no logró recuperarse de las heridas.
Un prontuario criminal extenso y posibles ajustes de cuentas
Alias «Mi Sangre» era un conocido cabecilla de la estructura criminal El Diamante, que opera en la comuna de Robledo, Medellín. Contaba con un historial delictivo amplio que incluía antecedentes por falsedad en documento público, extorsión, desplazamiento forzado, hurto calificado y agravado, concierto para delinquir y lesiones personales. En 2017, había sido capturado por sus vínculos con bandas criminales en la ciudad.
Según las primeras hipótesis de las autoridades, el ataque podría responder a un ajuste de cuentas dentro de la misma organización delincuencial, posiblemente relacionado con la pérdida de un dinero.
Segundo intento de homicidio frustrado en el hospital
Mientras se encontraba hospitalizado, Duque Ríos habría estado a punto de sufrir un nuevo atentado. Una mujer que se identificó como “enfermera privada” intentó ingresar a su habitación. Sin embargo, la familia alertó a la Policía, que detuvo a la sospechosa y descubrió que portaba varias cuchillas de bisturí y una libreta con el nombre de la víctima.
Investigación en curso
Las autoridades trabajan para esclarecer los móviles del atentado y el frustrado intento de homicidio, así como para identificar y capturar a los responsables de estos hechos. Este caso refleja las tensiones internas en las estructuras criminales que operan en Medellín y los riesgos asociados a sus líderes.
A.U.