Berlín, 17 diciembre de 2024- El activista y defensor de ballenas Paul Watson dijo este viernes que no pretende abandonar su lucha después de que Dinamarca rechazara extraditarle a Japón y le dejara en libertad esta semana tras haber estado encarcelado desde julio en una cárcel de Nuuk, en Groenlandia por solicitud del país asiático.
«Llevo 50 años haciendo esto. No pretendo dejarlo», dijo Watson en declaraciones a la cadena de televisión alemana NTV.
Indicó que, con su encarcelamiento, «a Japón le ha salido el tiro por la culata porque ha llevado el foco de atención a la continua actividad de caza ilegal de ballenas» de ese país.
El pasado martes el Ministerio de Justicia de Dinamarca decidió no extraditar a Japón al defensor de ballenas y ordenó su puesta en libertad.
Watson, quien fue detenido en virtud de una orden de arresto internacional lanzada por Japón, llevaba cerca de cinco meses en prisión preventiva en Nuuk, a la espera de que la Justicia danesa se pronunciase sobre la petición de extradición de las autoridades niponas.
El activista, de 74 años y fundador de las organizaciones ecologistas Greenpeace y Sea Sepherd Conservation Society, fue detenido el pasado 21 de julio cuando su embarcación atracó en Nuuk, capital de esta región autónoma.
La Justicia danesa recibió a principios de agosto la solicitud japonesa de extradición contra Watson, al que acusaban de haber agredido a cazadores de ballenas y de haber entorpecido su actividad en dos episodios ocurridos en 2010.
El activista canadiense-estadounidense, quien actualmente colabora con la Fundación Capitán Paul Watson, negó las acusaciones niponas y sostuvo en todo momento que su caso tenía «naturaleza política» por perseguir la caza ilegal de ballenas practicada por Japón.
EFE