Jerusalén, 24 de diciembre de 2024.- El Ministerio de Sanidad de la Franja de Gaza denunció este martes el asedio del Ejército israelí a los tres hospitales que funcionan parcialmente en la región del norte que sufre un cerco militar desde hace 80 días, acusándolo de buscar dejarlos fuera de servicio.

«Las fuerzas de ocupación israelí están forzando a los heridos y pacientes a evacuar el Hospital Indonesio en el norte de Gaza», informó el comunicado. El Indonesio, junto al Kamal Adwan de Beit Lahia y el Al Awda de Yabalia, es uno de los centros que desde el 6 de octubre sufre los ataques y las órdenes de evacuación israelíes.

Los pacientes han tenido que abandonar el hospital a pie para dirigirse hacia la ciudad de Gaza, también en el norte del enclave pero fuera de la zona asediada, recogió la agencia palestina de noticias Wafa.

«Hasta ahora seguimos siendo atacados», confirmó a EFE el director en funciones del Al Awda, Mohammed Salha.

En estos momentos, 65 empleados, 31 pacientes y tres bebés (el Al Awda es mayoritariamente un hospital de maternidad) se refugian de los ataques en el interior del centro.

Salha asegura que un tanque israelí acecha aún el Al Awda, el cual bombardeó esta mañana la tercera planta del centro. A la vez, un francotirador israelí apunta hacia el edificio.

Por su parte, el director del Kamal Adwan, Hussam Abu Safiya, difundió este martes un comunicado desde el hospital apelando al presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, para que detenga la agresión contra el centro, que se ha intensificado en los últimos tres días.

«Le pido que nos proteja y proteja el sistema sanitario», imploró Abu Safiya en el vídeo, «sé que usted es una persona que ama la democracia y es un hombre justo».

El magnate, que tomará posesión del cargo el próximo 20 de enero, despierta inquietudes sobre cuáles serán los efectos sobre Gaza de su retorno al cargo, ya sea contribuyendo a que se llegue un acuerdo que ponga fin a la guerra o ayudando a Israel a endurecer su ofensiva. En cualquier caso, tanto las autoridades israelíes como la palestinas consideran su retorno a la Casa Blanca un posible punto de inflexión en el conflicto.

Unos 91 pacientes siguen en este hospital refugiados en una hilera de camillas en sus pasillos, mientras que las inmediaciones del edificio han sido uno de los principales objetivos de los ataques de Israel en los últimos días.

Israel comenzó una campaña de bombardeos contra las localidades norteñas de Beit Lahia, Yabalia y Beit Hanoun el pasado 5 de octubre, que al día siguiente se convirtió en una invasión terrestre y un cerco militar total.

En 80 días, este asedio del norte se ha cobrado la vida de más de 2.700 palestinos, según los datos (que llevan semanas sin ser actualizados) del Gobierno gazatí. Además, se estima que unas mil personas permanecen desaparecidas.

A todo esto se suma que la Defensa Civil, encargada de recoger cadáveres y heridos entre los escombros, lleva más de mes y medio fuera de servicio en la zona debido al riesgo que supone la ofensiva.

La ONU estima que entre 10.000 y 15.000 personas siguen en la zona asediada, que antes de la guerra tenía más de 440.000 habitantes. Ahora, la mayoría de su población se ha visto sometida a desplazarse forzosamente, gran parte de ella a causa de este último asedio.

EFE

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