Redacción Medioambiente, 25 feb – La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Biodiversidad (COP16) reanudó este martes las negociaciones en Roma, una cumbre que requiere «decisiones políticas, no técnicas» y es una «oportunidad» para conseguir acuerdos en la financiación de biodiversidad, aseguró su presidenta, Susana Muhamad, en la sesión inaugural.
La presidenta de la COP16 subrayó que la agenda de financiación necesita de decisiones políticas para «trascender los actuales retos institucionales y las limitaciones fiscales» e instó a los países a comprometerse a adoptar «soluciones innovadoras y sostenibles» que «garanticen» los recursos necesarios para alcanzar los objetivos mundiales en materia de biodiversidad.
Muhamad, quien comunicó a principios de mes su renuncia como ministra de Ambiente de Colombia al presidente Gustavo Petro y está a punto de dejar el cargo, hizo un llamamiento a la acción mundial y a la voluntad política para «sostener la vida en el planeta» y «garantizar» la aplicación de los acuerdos alcanzados en esta cumbre, que serán «la hoja de ruta para los próximos seis años».
La colombiana dio inicio así a la segunda ronda de negociaciones de la COP16, después de una primera reunión en 2024 en Cali (Colombia) en la que la falta de quorum en una sesión maratoniana no permitió llegar a un acuerdo para «frenar y revertir» la pérdida de biodiversidad.
En Roma, del 25 al 27 de febrero, se debatirán las cuestiones clave para conseguirlo: la movilización de recursos, el futuro del mecanismo financiero y el seguimiento del Marco Mundial de Kunming-Montreal.
En la sesión plenaria también se destacó la necesidad de una planificación a largo plazo, «con una visión a cinco o seis años», para garantizar que los medios coinciden con los fines y sentar las bases para alcanzar los objetivos de 2030.
Además, la presidenta planteó varias incógnitas para incitar a los delegados a reflexionar: «¿Somos capaces de crear las capacidades que este Convenio y el Marco Económico de Montreal necesitan? ¿De trascender las estructuras institucionales que son viejas y anticuadas y están desfasadas ante los retos actuales del siglo XXI? ¿Somos capaces de despertar nuestra capacidad creativa y la posibilidad de imaginar que juntos podemos hacer algo más?», añadió.
Muhamad dijo que está «totalmente centrada en las negociaciones», a pesar de que está a punto de dejar el cargo de ministra de Ambiente, e hizo hincapié en que la COP16 sigue siendo un «símbolo de resistencia y esperanza», recordando que el propósito de este proceso multilateral sigue «intacto» y «los actores y las partes interesadas siguen ahí».
EFE