El pasado 6 de mayo, en las celdas de la Estación Candelaria de la Policía Nacional ubicada en el centro de la capital antioqueña, Anderson Fuentes Pérez, recluido en ese lugar por el delito de hurto calificado y agravado, tuvo que ser trasladado a un centro asistencial por graves heridas ocasionadas con arma blanca, al parecer durante una riña con otro interno identificado como Jhon Alexánder Romero Urrego, de 18 años de edad.
De acuerdo con las declaraciones de la víctima, el agresor le propinó cinco heridas en el tórax porque no tenía con qué pagarle la suma de $ 5000 que le debía por la compra de una gaseosa. El Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses le determinó al lesionado una incapacidad de 35 días porque una de las heridas le comprometió un pulmón.
Para extraer del lugar al herido y al victimario fue necesaria la participación de unos 25 uniformados, toda vez que en esa guarnición policial están detenidas por diferentes delitos 320 personas.
Romero Urrego, quien tiene dos procesos por delitos contra el patrimonio económico, no se allanó a los cargos que le imputó la Fiscalía General de la Nación en esta oportunidad por el punible de tentativa de homicidio.