Nueva Delhi, 11 de marzo de 2025.- Nueva Delhi excedió el año pasado casi veinte veces el límite de contaminación del aire que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS) y cerró 2024 como la capital con peor calidad del aire en el planeta por séptimo año consecutivo, según el último informe anual publicado por la suiza IQAir.
La capital india registró una concentración de partículas PM2.5 -las más dañinas para la salud humana por su diminuto tamaño- de 91,8 microgramos por metro cúbico de aire (µg/m³), muy por encima de los 5 microgramos por metro cúbico que la OMS recomienda no superar en el promedio anual.
Esto apenas supone cambios con respecto al año anterior, cuando Nueva Delhi registró una concentración de contaminantes similar -92,7 μg/m3-, y la convirtió de nuevo en la capital con el aire más tóxico del planeta, según el ranking anual de calidad del aire publicado este martes por la plataforma suiza especializada IQAir.
Las escenas de calles completamente envueltas en una densa niebla tóxica volvieron a ser habituales en 2024 en Nueva Delhi, especialmente en invierno, cuando la contaminación se incrementa.
«En invierno, en el norte de la India se acumula una cantidad importante de contaminación del aire debido a factores geográficos, a la quema de cultivos y a toda una serie de factores», dijo a EFE la responsable de calidad del aire de IQAir, Christi Chester.
Entre los motivos que influyen a la baja calidad del aire en Nueva Delhi, y en la mayor parte de la India, figuran las emisiones de vehículos y la adulteración de su combustible, la quema de biomasa por los agricultores o el polvo que generan las actividades de construcción, según citó el informe.
Un invierno tóxico
En noviembre, tradicionalmente el peor mes en materia de contaminación del aire, el territorio de Delhi -en el que se incluye Nueva Delhi- registró una concentración promedio de partículas PM2.5 de 276 microgramos por metro cúbico, superando hasta en 55 ocasiones el límite de la OMS.
La llegada del frío, además de la celebración de la festividad hindú de Diwali, en la que es tradicional el lanzamiento masivo de petardos y fuegos artificiales, contribuye a que aumenten los niveles de toxicidad.
La elevada contaminación provocó a partir de ese mes el cierre de colegios y la puesta en marcha de distintas restricciones en la capital. Entre ellas se incluyeron la paralización de las actividades de construcción, el veto al acceso de vehículos pesados o la promoción del teletrabajo para los funcionarios.
A pesar de estas medidas, que se integran en un plan nacional para mejorar la calidad del aire, los resultados siguen sin alcanzarse y los desafíos persisten «debido a la implementación inconsistente de políticas y a una infraestructura inadecuada», reveló el informe.
En este sentido, Chester afirmó que el problema «es una confluencia de muchas cosas» y sugirió medidas como regular el transporte y el combustible empleado por los vehículos.
«Otra idea es colaborar con otros Gobiernos regionales porque no toda la contaminación del aire que afecta a Delhi se genera allí», agregó.
Si bien la capital India se mantuvo en lo más alto del ranking en 2024, la India cayó este año al quinto puesto -desde el tercero en 2023-, gracias a una ligera mejora de sus niveles de contaminación del aire.
El año pasado, los 667 monitores que la India tiene repartidos por todo su territorio registraron una concentración de partículas PM2.5 de 50,6, en comparación a las 54,4 del año previo.
No obstante, el país albergó en 2024 seis de las diez ciudades con peor calidad del aire en el mundo, y una de cada tres urbes indias con sistemas de medición excedió por diez veces el límite de la OMS.
Sin embargo, Chester destacó la expansión de esta red de monitoreo como «uno de los aspectos más prometedores» en la India, que sobre todo está teniendo lugar en el entorno rural, donde hasta ahora no había manera de medir los índices de contaminación.
EFE