Tres hombres fueron asesinados en hechos violentos registrados en la zona rural del municipio de Anorí, en el nordeste antioqueño. La masacre, denunciada por organizaciones de derechos humanos, eleva a 18 el número de masacres cometidas en Colombia en lo que va de 2025, y mantiene en alerta a las autoridades y comunidades afectadas por la presencia de grupos armados ilegales.

Los cuerpos sin vida fueron encontrados en sectores distintos, pero con características similares, lo que hace presumir una conexión entre los crímenes. Las víctimas presentaban múltiples impactos de arma de fuego y fueron halladas en la tarde del domingo 20 de abril, en veredas ubicadas a varios minutos del casco urbano de Anorí.

La denuncia pública fue hecha por la organización Corpades, que a través de su cuenta en la red X (antes Twitter), alertó sobre la masacre:

“Aunque las autoridades intentan negar y desviar la atención sobre esta nueva masacre, fuentes consultadas por Corpades afirman que se presentó en la noche de ayer”.

Hallazgos en Santa Gertrudis, El Arenal y Bolívar

El primer cuerpo fue hallado en la vereda Santa Gertrudis, aproximadamente a 20 minutos del centro poblado. La víctima fue identificada como Andrés Norteña Restrepo, de 22 años, quien presentaba múltiples impactos de bala. La inspección judicial del cadáver estuvo a cargo de las autoridades forenses, que trasladaron el cuerpo a la morgue de Anorí.

Los otros dos cuerpos fueron encontrados en la vereda Bolívar, a una hora del casco urbano, sin documentación que permitiera su identificación inmediata. Al igual que en el primer caso, ambos hombres presentaban heridas por arma de fuego. Las autoridades confirmaron que los cuerpos fueron ingresados en horas distintas a la morgue municipal.

Inicialmente, uno de los cuerpos fue ubicado en un sector conocido como El Arenal, mientras los otros dos aparecieron cerca de la vía que conduce a Charcón.

Las víctimas fueron identificadas más tarde como Jhon Jairo Córdoba, Juan Camilo Jaramillo y Robinson Carvajal, según confirmaron fuentes judiciales.

Autoridades investigan y no descartan presencia de grupos armados ilegales

La Policía de Antioquia logró identificar a una de las víctimas, y explicó que se activaron los protocolos judiciales de inspección y levantamiento. También se adelantan diligencias para establecer los móviles del crimen y la identificación plena de las otras dos víctimas.

Los primeros indicios apuntan a que los crímenes podrían estar relacionados con la presencia de estructuras armadas organizadas que operan en esta región, como el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y las disidencias de las FARC, conocidos como EMBF, así como el Ejército Gaitanista de Colombia (EGC), en disputa por el control territorial.

De hecho, se han reportado enfrentamientos recientes entre estas estructuras en la zona, lo que mantiene a las comunidades en alto riesgo humanitario.

Alerta temprana vigente en la región

La organización Indepaz recordó que la Defensoría del Pueblo emitió la Alerta Temprana 023/22, que advierte del riesgo sistemático en municipios como Amalfi, Anorí, Remedios, Segovia y Vegachí, por la imposición de normas armadas, control social y económico por parte de actores armados ilegales.

La zona donde ocurrió la masacre está bajo jurisdicción de la Séptima División del Ejército Nacional, que no ha emitido aún un pronunciamiento oficial sobre los hechos.

Por ahora, la Fiscalía General de la Nación asumió la investigación, y será la encargada de establecer los móviles de esta nueva masacre, cuyas primeras hipótesis apuntan a posibles disputas por rutas del narcotráfico y control territorial.

A.U.

Share.