Medellín, Colombia, 12 julio de 2025.- El corregimiento de San Sebastián de Palmitas, una zona urbana-rural del occidente de Medellín históricamente reconocida por su tranquilidad, ha sido sacudido por una serie de homicidios que elevan la alerta sobre el deterioro de la seguridad en la ciudad. En lo que va del año, ya se han registrado tres asesinatos, frente a cero casos en igual periodo de 2024. La ONG Corpades cuestiona el silencio institucional y lanza una advertencia: la violencia está alcanzando territorios que antes permanecían al margen del conflicto urbano.
Crímenes recientes en Palmitas
El jueves 10 de julio, hacia las 7:41 a.m., fue asesinado Alejandro Londoño Loaiza, de 35 años, en el barrio Volcana Guayabal, en una zona boscosa del corregimiento. La víctima presentaba varias heridas por arma de fuego. La inspección técnica al cadáver fue realizada por el CTI de la Fiscalía, en coordinación con el fiscal del caso. El hecho fue detectado por labores de patrullaje.
Tan solo un día después, el viernes 11 de julio, se reportó otro homicidio. La víctima fue Herlin Andrés Rodríguez Campo, de 46 años, asesinado a balazos en el barrio La Suiza, también en Palmitas. La SIJIN de la Policía Nacional y el CTI atendieron el caso a las 7:01 a.m., tras un reporte recibido por la central de radio. El cuerpo fue encontrado en vía pública con múltiples impactos de bala.
Ambos crímenes se suman a un tercer homicidio ocurrido previamente en 2025, elevando el conteo total a tres asesinatos en este corregimiento, en un año particularmente crítico para Medellín.
¿Qué está pasando en Palmitas?
Corpades, organización dedicada al análisis del conflicto urbano, se pregunta qué está ocurriendo en un territorio que hasta hace poco era considerado como uno de los más tranquilos de la ciudad. “¿Van a pasar de agache la Policía, la Fiscalía y la Secretaría de Seguridad?”, cuestiona en su más reciente pronunciamiento.
La ONG también advierte que la situación de Palmitas es reflejo de un patrón más amplio: la violencia urbana en Medellín se está desbordando, alcanzando zonas periféricas y rurales donde antes no se registraban homicidios con tanta frecuencia.
Contexto de violencia en Medellín
Con los homicidios reportados entre el 10 y 11 de julio, Medellín alcanza 186 muertes violentas en lo corrido de 2025, un aumento del 26 % en comparación con los 159 casos registrados en igual periodo de 2024.
Aunque la ciudad ha registrado 85 días sin homicidios este año —cuatro menos que en igual periodo del año anterior—, el repunte general de asesinatos preocupa a organizaciones sociales, líderes comunitarios y defensores de derechos humanos.
Corpades advierte sobre debilitamiento del Espacio Socio-Jurídico
La ONG Corpades advirtió que la violencia urbana en Medellín sigue en aumento y que la seguridad se le está saliendo de control a la institucionalidad. Según la organización, las respuestas oficiales han sido insuficientes frente a un panorama cada vez más complejo.
Uno de los principales elementos que preocupa a Corpades es el Espacio Socio-Jurídico instalado en la cárcel La Paz de Itagüí, el cual funcionó durante años como un muro de contención para evitar guerras entre bandas y controlar el accionar de estructuras armadas ilegales, incluidas organizaciones de la Delincuencia Organizada Transnacional (DOT) como El Tren de Aragua, Los AK47, Los Gallegos, Los Kilas y La Cota.
No obstante, Corpades advierte que este espacio “presenta fisuras que van creciendo”, lo cual pone en riesgo su efectividad como mecanismo de prevención de homicidios y contención del conflicto urbano.
Según la ONG, esas fisuras se deben a la falta de avances contundentes en las conversaciones lideradas por el Gobierno Nacional a través de la Delegación de Paz. “No es posible avanzar en conversaciones si el Estado sigue actuando fragmentado”, afirmó la organización. Además, señaló la aparente falta de voluntad política de la Alcaldía de Medellín y la Gobernación de Antioquia, que —a juicio de Corpades— estarían bloqueando el proceso de Paz Urbana-Rural y evidenciando una preocupante fragmentación institucional.
“¿Por qué no se ha pronunciado la Delegación de Paz del Gobierno Nacional ante el evidente aumento en las cifras de homicidios?”, se pregunta Corpades. Hasta el 11 de julio, Medellín ya acumula 38 homicidios más que en igual periodo de 2024.
Corpades exige compromiso de Medellín y Antioquia con la Paz Urbana-Rural
Ante la creciente violencia en Medellín, los municipios del Valle de Aburrá y otras zonas de Antioquia, Corpades reitera su llamado al alcalde de Medellín y al gobernador de Antioquia para que se comprometan activamente con las iniciativas de paz dirigidas al desmantelamiento de las estructuras armadas organizadas que operan en la región, a través de mecanismos de diálogo y participación institucional.
La organización considera fundamental que ambos mandatarios se vinculen de manera decidida a la construcción de una Paz Urbana-Rural, mediante el fortalecimiento de dos espacios clave: el Espacio Socio-Jurídico instalado en la cárcel La Paz de Itagüí y el Espacio Socio-Jurídico establecido con el Ejército Gaitanista de Colombia (EGC). A ello se suma el acompañamiento a la mesa de diálogo con el EMBF y el respaldo a la reactivación de las conversaciones con el ELN, procesos que, según Corpades, requieren voluntad política real.
“La paz debe ser una prioridad política y social. No es posible seguir ignorando la magnitud del conflicto urbano y rural. El interés general debe estar por encima de los intereses particulares”, concluyó la organización.
A.U.