Un grupo de 22 abogados que representan a excombatientes de las FARC ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) de Colombia denunciaron este miércoles amenazas de muerte en un panfleto firmado por las «Águilas Negras», un grupo heredero del paramilitarismo.
Uno de los amenazados es Diego Martínez, un defensor de derechos humanos que lleva el caso de Dimar Torres, asesinado en abril pasado a sangre fría por un cabo del Ejército en la convulsa región del Catatumbo, fronteriza con Venezuela.
El movimiento Defendamos la Paz, del cual hacen parte exnegociadores con las FARC y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), señaló que los abogados recibieron la amenaza por WhatsApp el pasado 10 de noviembre, algo que tacharon como «un claro ataque al proceso de paz».
«Pedimos al Gobierno condenar públicamente la amenaza y proveer garantías de seguridad para los abogados, incluyendo un refuerzo de los esquemas de seguridad. También le pedimos a la Fiscalía una investigación contundente», añadió.
El movimiento también solicitó a los mecanismos internacionales de verificación de la implementación del acuerdo de paz, firmado hace tres años, «brindar su apoyo y denunciar este claro intento de intimidar a los defensores realizando su función en aras de la reconciliación y la paz».
El domingo pasado, el partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC) denunció el asesinato de Diego Fernando Campo, quien fue candidato de esa colectividad a la Asamblea del departamento de Nariño, fronterizo con Ecuador, en las elecciones regionales del pasado 27 de octubre.
La FARC aseguró en redes sociales que «no hay garantías para el ejercicio de la política para las y los firmantes de la paz» y añadió que se debe parar «el genocidio» de sus militantes.
Según ese partido, desde la firma del acuerdo de paz en noviembre de 2016 han sido asesinados al menos 168 exguerrilleros, de los cuales 88 han muerto desde que el presidente Iván Duque asumió el cargo, el 7 de agosto del año pasado.
EFE