El sacerdote tenía 91 años y había sido destituido hace 10 por denuncias de abuso sexual en Francia. Papá del homicida también fue víctima del clérigo.
El joven de 19 años trabajaba en la casa del padre Roger Matassoli como mayordomo y después de cometer el crimen, en noviembre pasado, intentó huir de las autoridades.
Fue trasladado a un hospital por problemas psiquiátricos y luego dijo que no recordaba haber hecho nada de lo que le acusaban.
El padre Matassoli fue acusado de abusar sexualmente de al menos cuatro niños entre 1960 y 2000, incluido el joven que lo mató y su progenitor.
El obispo de Beauvais, Jacques Benoit-Gonnin, dijo que Matassoli había sido destituido de sus funciones en 2009 por las acusaciones de pederastia.
Sin embargo, medios franceses aseguraron que el alto prelado lo mantuvo en nómina hasta 2018, cuando tuvo en cuenta el testimonio de dos de las víctimas, así como del presunto asesino y de su padre, que se suicidó luego de conocer que su hijo también había sido abusado.
Tomado de Noticias Caracol