Martha Elizabeth Orozco Acevedo habría recibido dinero por no reportar el vuelo de aeronaves cargadas con droga. Estados Unidos ya pidió la extradición de la mujer, su esposo y treinta personas más.
Un problema en la coordinación del turno de trabajo del 5 de noviembre de 2017 de Martha Elizabeth Orozco Acevedo, controladora aérea del Aeropuerto Internacional Ernesto Cortissoz de Barranquilla, dejó en evidencia el sobrevuelo de una avioneta Cessna 182 sobre el espacio aéreo colombiano. Esta aeronave, según las autoridades, tenía “fines ilegales” y “pertenecía a carteles mexicanos de la droga”.
Orozco Acevedo, según la investigación adelantada, era la encargada de que ese día el sobrevuelo de la avioneta sobre espacio aéreo del Caribe pasara inadvertida. Al no estar la mujer encargada del radar del aeropuerto, como se había planeado, otro controlador dio aviso a la Fuerza Aérea de Colombia de la presencia de la aeronave cuando esta estaba próxima a aterrizar en una pista clandestina en Pivijay, Magdalena.
La reacción se dio con una nave SR-560 y A37 de combate, pero la Cessna 182 hizo maniobras evasivas. Entonces, le dispararon hasta hacerla explotar. Hombres del Comando Aéreo de Combate N° 3 y personal de Antinarcóticos de la Policía Nacional llegaron hasta el lugar, en donde encontraron más de 500 kilos de clorhidrato de cocaína, 11 canecas de ACPM y 1 caneca de gasolina.
Ese mismo día fue iniciada la investigación contra Orozco Acevedo y 31 personas más, incluyendo a su esposo, Harvey Guana, quien sería el enlace con Jaison Dávila, uno señalado contacto con los carteles mexicanos.
Al parecer, la controladora aérea del Cortissoz recibía dinero de dichos carteles para no reportar el sobrevuelo de las aeronaves cargadas de droga sobre el espacio aéreo de la Costa Caribe, que se habrían registrado por lo menos una vez al mes.
Como resultado del proceso, la mujer, originaria de Santa Marta y con más de 30 años de experiencia en su cargo, fue capturada el septiembre pasado en Barranquilla, por hombres de la Fiscalía y la Dijín, con el apoyo de agentes de la DEA de Estados Unidos. Una de las principales pruebas de las autoridades son unos videos que registran el momento en que recibe la plata fruto del acuerdo para no reportar los sobrevuelos, según información publicada por el diario El Heraldo.
Orozco Acevedo, que está recluida en la cárcel Buen Pastor de Bogotá, no está vinculada a ningún proceso en Colombia, pero las autoridades de Estados Unidos ya solicitaron su extradición por pertenecer a la organización vinculada al cartel de Sinaloa.
Dos días después de la captura de Orozco Acevedo, fueron capturados en Santa Marta los hermanos Rafael Noguera Abello y Orlando Noguera, a quienes se les señala de ser los dueños de la finca en donde iba a aterrizar la avioneta.
Los Noguera, a quienes se les reconocía en la región como comerciantes de ganado, también se encuentran recluidos en Bogotá y están a la espera de que se cumpla la orden de extradición.
Tomado de Revista Semana