En las últimas dos décadas Disney ha dejado de ser la carismática compañía de Mickey Mouse para convertirse en un imperio del mundo del entretenimiento mundial sin rival, todo bajo el liderazgo de Bob Iger, el director que durante 15 años ha supervisado este proceso.
Tras el anuncio de su retirada como consejero delegado de Disney, Iger deja un currículum en el que figura la modernización y recuperación de «Star Wars», el incontestable éxito de los cómics de Marvel en la gran pantalla y varias de las películas más taquilleras de la historia como «Avengers: Endgame» y «Frozen».
En una época extremadamente cambiante para el sector audiovisual, el ya exdirector de Disney se convirtió en la figura más importante de Hollywood al ser capaz de reclutar bajo el mismo paraguas a estudios tan importantes como Pixar («Toy Story», «Finding Nemo»), Lucasfilm («Star Wars»), Marvel y 20th Century Fox.
Desde R2-D2 hasta Hulk, pasando por «The Simpsons», «Cars», Baby Yoda, los mundos de «Avatar» e incluso los documentales de National Geographic, gran parte de la cultura de masas mundial descansa en la marca Disney.
UN DOMINADOR ABSOLUTO
Para tener una idea del dominio de la compañía en el panorama actual basta con mirar las películas más taquilleras de 2019 en todo el mundo: siete de ellas pertenecen a Disney y el número uno corresponde a «Avengers: Endgame», la joya que coronó el imperio de Marvel y que es la cinta más taquillera de la historia (sin tener en cuenta la inflación).
Pero además de hacerse con la iconografía popular del planeta, Iger aprovechó su mandato para potenciar el papel de su compañía fuera de las pantallas, en todos los momentos de ocio, con sus divisiones de parques temáticos, hoteles e incluso viajes en cruceros a islas remotas.
De hecho el sucesor de Iger, Bob Chapek, era hasta el martes el jefe de la división de parques de Disney y se convertirá en el séptimo presidente de la compañía desde su fundación en 1923.
EL MOMENTO DEL STREAMING
«Creo que este es el momento óptimo para una transición a un nuevo consejero delegado», señaló el propio Iger en un escrito en el que destacó el reciente éxito del lanzamiento del servicio de streaming de la empresa, Disney +.
Ese servicio, considerado como el Netflix de Disney y estrenado hace unos meses, ha sido la última aportación del dirigente a su legado.
Con la revolución que ha supuesto internet en el consumo audiovisual, el paso que necesitaba la empresa era hacerse un camino en el mundo de las plataformas de «streaming» y de los pagos por suscripción en el que ya compiten gigantes tecnológicos como Amazon y Apple.
Como muestra de la astucia de Iger en su estrategia cabe señalar que para el lanzamiento de la plataforma, en un mercado que comienza a saturarse, el director decidió apostar por nuevas versiones de contenidos que ya contaban con una base fiel de seguidores como la serie «The Mandalorian», inspirada en el universo Star Wars, justo cuando la saga original de la franquicia dijo adiós tras más de cuatro décadas.
Asimismo decidió recuperar series infantiles como «Lizzie McGuire», en clave adulta, o la exitosa «High School Musical», con una historia que referencia el exitoso musical de 2006.
REIMAGINANDO PARA EL FUTURO
En cierto modo, Iger ha destacado precisamente por eso: Rescatar historias del imaginario colectivo y reconvertirlas en nuevos productos que han dado a Disney una receta infalible para lograr el éxito de masas y, de paso, un jugoso rendimiento económico.
Por ejemplo, la nueva «The Lion King» asombró y mosqueó a la crítica a partes iguales con su animación hiperrealista y algo escasa de brío, pero con 1.656 millones de dólares recaudados, la segunda cinta más taquillera de 2019, pocos pudieron cuestionar esta apuesta de Iger, un éxito que se ha repetido con los «remakes» de «Aladdin» («2019»), «The Jungle Book» (2016) y «The Beauty and The Beast» (2017).
Así, en 2019 Walt Disney cerró su año fiscal con unos beneficios netos de 10.441 millones de dólares, mientras que en 2006, el primero completo de mandato de Iger, la compañía apenas supero los 3.000 millones.
Con ese currículo, algunos especulan sobre el futuro de Iger.
La versión oficial dice que seguirá como «presidente ejecutivo» de Disney hasta 2021, la extraoficial toma sus declaraciones en las que reconoció que consideró presentarse las primarias para ser presidente de EE.UU. y especula con un posible salto a la política, animado por otros empresarios de éxito como Michael Bloomberg y el propio Donald Trump.
EFE.