El fiscal general de Estados Unidos, William Barr, y el Departamento de Estado anunciaron que el mandatario venezolano, Nicolás Maduro es señalado de crímenes federales de narcotráfico y narcoterrorismo. Esto tras una investigación llevada a cabo por las autoridades de Nueva York y de Florida.
Eso permite incrementar la presión y las sanciones contra Venezuela, sus dirigentes y otros integrantes del círculo cercano de Maduro. Además afectaría acciones inmediatas como el préstamo que está pidiendo el presidente a organismos internacionales para enfrentar la crisis del coronavirus.
En este momento únicamente otros cuatro países son considerados por Estados Unidos como patrocinadores del terrorismo. Estos son Irán, Corea del Norte, Siria y Sudán, a los que señalan de haber patrocinado o de estar apoyando en este momento a grupos que llevan a cabo acciones de terrorismo internacional.
El gobierno de Colombia ha sido uno de los que más pruebas han presentado sobre la presencia de grupos como el ELN y las disidencias de las Farc en territorio venezolano, con la supuesta complicidad del gobierno de Nicolás Maduro.
Desde el Grupo de Lima y ante Naciones Unidas, el presidente Iván Duque ha presentado documentos de las acciones de esas organizaciones no solo en la frontera, sino en varios de los estados. Además también se habla de la presencia de Hezbolá, que incluso estaría trabajando con los grupos colombianos.
En la presentación formal de la acusación afirma que durante los últimos 20 años, el gobierno de Venezuela permitió la corrupción de todo el sistema político y que se convirtiera en un aparato que facilita el narcotráfico.
Habla directamente del “Cartel de los Soles” en el que incluye a Maduro, al presidente del Tribunal Supremo Electoral, Maikel Moreno, al ministro de Defensa, Vladimir Padrino, al vicepresidente económico, Tarek el Aissami y al presidente de la Asamblea Constituyente, Diosdado Cabello.
En ese sentido ofrece una recompensa de 15 millones de dólares por información que lleve a la captura de Maduro y de 10 millones por las otras figuras del régimen.
En la acusación, Estados Unidos también señala a líderes de las Farc por sus acciones de tráfico de drogas. Dice que a cambio recibieron armas, municiones y explosivos para seguir su campaña terrorista en Colombia.
Tomado de Caracol Radio