José Ignacio Ramírez, de 33 años, fue capturado en Girardot (Cundinamarca) con cerca de 3 kilos de cocaína de alta pureza camuflados en una canastilla de víveres; sustancia que al parecer tenía lista para su comercialización.
Según el grupo de investigadores del CTI, el procesado, quien tiene varias anotaciones por delitos similares, supuestamente hace parte de una organización delictiva que opera desde Bogotá y realiza los envíos de la droga al municipio cundinamarqués, ocultándola entre cajas de víveres.
Para este propósito, “los delincuentes tienen como modo de operar, el uso de buses de transporte intermunicipal desde Bogotá hacia Girardot y a otros municipios turísticos del departamento”, indicó uno de los investigadores.
La Fiscalía Seccional Cundinamarca presentó ante un juez de control de garantías al ahora imputado y el juez promiscuo del municipio de Nariño (Cundinamarca) profirió medida de aseguramiento domiciliaria para él, quien mostró su voluntad de colaborar con información importante en el esclarecimiento de este caso.