Un masivo escándalo de abuso sexual está sacudiendo a la industria de la lucha libre y llevó a despidos e investigaciones en la WWE y otras grandes empresas, así como a pesquisas policiales. Decenas de mujeres denunciaron públicamente en las redes sociales casos de asalto y agresión sexual por parte de varios luchadores e, incluso, directivos, a través de la campaña #SpeakingOut.
Inicialmente, las acusaciones fueron presentadas contra varios luchadores de la NXT UK —empresa con sede en el Reino Unido que forma parte de la WWE— como El Ligero, Jordan Devlin, Wolfgang y Joe Coffey.
Sin embargo, la lista de acusados creció durante la última jornada, y, actualmente, incluye también los nombres de deportistas de EE.UU. y de otros países, entre ellos Joey Ryan y Dave Crist, ambos de Impact Wrestling, y la joven estrella de la WWE, Matt Riddle.
Las promotoras de lucha libre no tardaron en reaccionar al escándalo.
Luchadores de la WWE
En el caso de Matt Riddle, las acusaciones provienen de la también luchadora Candy Cartwright, quien lo acusa de haberla forzado a practicarle sexo oral en el 2018.
El propio luchador negó las acusaciones. «Son completamente falsas. Es otro intento de acosar y humillar al señor y la señora Riddle y tratar de empañar su reputación», dice el comunicado emitido por los abogados del deportista, en el que también se destaca que las acusaciones provienen de una persona que ha seguido «acosando» a la familia del luchador durante dos años.
Por su parte, la WWE advirtió en un comunicado que «cualquier acusación de esta naturaleza» es tomada muy en serio por la compañía, por lo que ya se encuentran «investigando el asunto».
Otra estrella británica de la NXT UK, El Ligero (Simon Musk), también respondió a las denuncias en la Red y se disculpó por enviar «mensajes no deseados» a varias mujeres. «Me disculpo sinceramente por mis acciones y cualquier daño que haya causado», escribió. Por otra parte, negó categóricamente las acusaciones presentadas por la luchadora Violet O’Hara, quien ha asegurado que este la «asaltó de manera indecente» hace varios años.
Jordan Devlin, excampeón mundial de lucha libre en la categoría de los pesos cruceros de la NXT, ha sido acusado de abusar físicamente de una mujer identificada como Hanna Francesca, según recoge Forbes. Por su parte, Devlin desmintió estas acusaciones por medio de su cuenta de Twitter, asegurando que «se trata de un caso de una agenda personal maliciosa».
Además, la WWE en un breve mensaje informó que despidió al luchador británico Jack Gallagher, conocido como ‘The Gentleman’, quien también fue denunciado por acoso sexual. La empresa no precisó los detalles de la rescisión del contrato.
En general, «la WWE no tolera en absoluto los asuntos que implican la violencia, el maltrato infantil y la agresión sexual», aseguró la empresa respecto al escándalo. «Al ser arrestado por tales actos, cualquier empleado de la WWE será suspendido inmediatamente», añadió.
AEW
La empresa de lucha libre profesional All Elite Wrestling (AEW) afirmó que su luchador Jimmy Havoc, cuyo nombre también aparece en la lista del movimiento ‘SpeakingOut’, va a recibir un tratamiento. Esto ocurre después de que una joven llamada Rebecca Crow asegurara en Twitter que mantuvo relaciones con el deportista durante 3 años y que este la amenazaba con suicidarse y se hacía daño frente a ella.
«Deseamos a Jimmy Havoc todo lo mejor mientras recibe tratamiento y asesoramiento para sobrellevar los problemas de salud mental y su abuso de sustancias», publicó. Mientras tanto, la AEW «evaluará el estatus» del luchador en la compañía y abordará el asunto una vez que termine su rehabilitación.
Impact Wrestling
La compañía Anthem, propietaria de la Impact Wrestling, fue la última en lanzar una declaración oficial sobre las acusaciones relacionadas con ‘SpeakingOut’ contra Dave Crist y Joey Ryan. Crist es señalado en las denuncias como «un depredador absoluto» y de haber acosado a varias jóvenes, mientras a Ryan se le acusa de manosear a una mujer. Michael Elgin, luchador de la misma empresa, fue acusado de mandar fotos inapropiadas a mujeres.
«Estamos investigando atentamente las diversas acusaciones que se están haciendo a través de las redes sociales», subrayó Anthem en un comunicado, citado por PWInsider, y agregó que está revisando «todos los incidentes relacionados con los luchadores y el personal de Impact Wrestling para determinar un plan de acción adecuado».
Otras empresas
Por su parte, la empresa británica Progress Wrestling anunció este viernes en su página web que sus luchadores David Starr y Marc ‘Paz’ Parry «ya no trabajan» para la compañía, mientras que Scotty Davis, Jordan Devlin y Travis Banks «serán suspendidos indefinidamente». A los dos últimos también se les ha quitado el título de campeones por parejas. «Continuamos monitoreando y escuchando al movimiento ‘SpeakingOut’ para poder tomar las acciones apropiadas cuando sea necesario», reza la nota.
Además, cortaron los lazos con luchadores acusados de abuso sexual las compañías Black Label Pro y British Wrestling Revolution. La primera despidió a Johnathan Wolf, mientras la otra aseguró que habían liberado del contrato a un peleador de la lista, sin revelar su nombre. Por su parte, la compañía Chikara informó que el luchador Kobald, acusando de abuso físico y mental, ya no trabaja para la empresa.
Además, a Marty Scurll, luchador de la empresa Ring of Honor (ROH), se le acusa de haber manoseado a una joven.
Acusaciones contra directivos
También se ha visto implicado el vicepresidente de la NWA, Dave Lagana, quien fue acusado de agresión sexual por la luchadora profesional Liz Savage. «Después de ser amiga de David Lagana durante cuatro años me asaltó sexualmente», escribió la deportista en su cuenta de Twitter.
Unas horas después, la NWA comunicó que Lagana «renunció a su puesto, con efecto inmediato». Además, algunas de las actividades de la empresa «están temporalmente detenidas, a la espera de una reestructuración de los puestos de dirección ejecutiva».
Jim Cornette, mánager de lucha libre profesional, también respondió a las acusaciones de abuso sexual contra él y su esposa Stacey Cornette. Según afirmaron anteriormente varios luchadores, durante su tiempo en el Ohio Valley Wrestling, el hombre se aprovechaba de los jóvenes deportistas para que realizaran actos sexuales con su esposa, mientras observaba.
«Sé que mi nombre tiene que estar involucrado en todo esto porque llama la atención, pero estoy demasiado ocupado», indicó Cornette en una publicación en Twitter y agregó que está tomando medidas legales.
Mientras, dado que varios de los luchadores señalados en las redes son ciudadanos británicos, la Policía del condado Yorkshire del Oeste «está llevando a cabo las primeras investigaciones», tuiteó Jonathan Savage, reportero de la BBC.
Voces de apoyo
Por su parte, varios luchadores apoyaron a las mujeres que publicaron sus acusaciones, y pidieron cambios radicales en la lucha libre profesional. Big E de la WWE tuiteó que «reza para que la industria se deshaga rápidamente de los depredadores y abusadores».
La luchadora Bayley, actual campeona femenina de SmackDown, subrayó que espera que la iniciativa ‘SpeakingOut’ «ayude a alguien que pueda tener experiencias similares y evitar que estas cosas vuelvan a suceder».
Tomado de Actualidad RT
