Por LA NUEVA PRENSA
El abogado penalista Augusto Ocampo interpuso este martes una acción de tutela contra el fiscal general, Francisco Barbosa, debido a que se negó sistemáticamente a responder una recusación que por medio de un derecho de petición le presentó el periodista Gonzalo Guillén el pasado 16 de marzo para que se aparte de todas las investigaciones que existen sobre la llamada Ñeñe-Política.
Guillén le puso de manifiesto a Barbosa su declarada amistad íntima con Iván Duque y sus vínculos con la campaña electoral que lo llevó a la presidencia en una jornada electoral que tuvo votos adquiridos ilícitamente por el narcotraficante José Guillermo “Ñeñe” Hernández.
Barbosa ya ha sido recusado también, pero ante la Corte Suprema de Justicia, por el abogado Miguel Ángel del Río y, por otra parte, la reconocida organización no gubernamental Dejusticia, que solicitó su reemplazo por un fiscal ad hoc debido a los evidentes intereses que tiene en el caso de la “Ñeñe-Política”.
En su derecho de petición a Barbosa, Guillén le puso de presente un mensaje de su cuenta de Twitter en el que describió su amistad de más de 25 años con Duque y celebró su triunfo.
Barbosa, agrega Guillén, eliminó su cuenta de Twitter con el objeto deliberado de borrar todos los mensajes que, además de aquel, daban cuenta de su estrecha amistad con Duque, su campaña, y con el mismo “Ñeñe Hernández”.
Pese a que Barbosa se negó a contestar el derecho de petición, violando así el artículo 23 de la Constitución Nacional y diversas normas penales y disciplinarias, optó por meter presos a los dos agentes de la DIJIN que de manera lícita descubrieron las primeras pistas de la forma como “Ñeñe” Hernández compró votos para Duque y financio su campaña con aportes que no aparecen en las cuentas oficiales.
La “Ñeñe-Política” fue destapada y documentada públicamente por Guillén en La Nueva Prensa y ha sido ventilada por una larga investigación periodística que ha llevado a cabo con Julián Martínez y Diana López Zuleta.
Tomado de La Nueva Prensa
