Lo manifestó en una reunión con el gremio de los taxistas, en la que agregó que sus «ilusiones» en la alcaldía eran otras; pero había que tener paciencia.
En una de sus intervenciones, López aseguró que conocía el agotamiento de los bogotanos por las medidas que se han tomado para prevenir la propagación del coronavirus.
Ella es una de las que está “más cansada” de esa situación, manifestó, porque tenía “ilusiones mucho más importantes” que decirle a la gente qué hacer y que no.
“Mi aspiración en la vida no era tener que sacar un decreto cada 15 días diciéndole a la gente cómo tiene que vivir ¡Qué mamera! Ese, claramente, no es nuestro rol. […] Y por muy agotados que estemos, algo que vamos a necesitar es una cosa que a mí en lo personal me cuesta mucho en la vida y es tener paciencia”, declaró la alcaldesa.
Para López esa es la “gran lección”, pues, si bien todos quisieran volver a los abrazos y las fiestas, todavía queda mucho por vivir. La forma correcta para hacerlo, y salir del coronavirus, según la alcaldesa, es “cambiando hábitos”.
Tomado de Pulzo