Con el acompañamiento de la Alcaldía de Medellín, la economía de los barrios se fortalecerá con proyectos productivos y emprendimientos de víctimas del conflicto armado.
A través del componente de Autonomía Económica del Equipo de Atención y Reparación Integral a Víctimas de la Secretaría de Inclusión Social, Familia y Derechos Humanos, la meta es apoyar a unas 400 unidades productivas de esta población con una inversión de $800 millones.
Entre marzo y agosto, se avanzó con ayuda económica para 70 negocios familiares con recursos por $140 millones. Durante septiembre, se beneficiarán otros 182, con $364 millones.
Cada uno recibe $2 millones para la compra de maquinarias e insumos, siempre en busca de que se adquiera por lo menos un activo fijo para asegurar una capacidad mínima instalada. Por ejemplo, si se trata de una tienda, no toda la inversión se destina a la compra de surtido, sino también a la adquisición de vitrinas, estanterías o una máquina registradora; y si es un negocio de confecciones, fuera de telas e hilos, se compra una máquina de coser.
Este proceso empieza con el acompañamiento para la elaboración de un plan de negocios y de inversión. Posteriormente, se mantiene un seguimiento de forma permanente para determinar cómo han aprovechado los recursos y orientar a los beneficiarios en planes de mejoramiento.
“A las víctimas del conflicto armado debemos apoyarlas para que logren autonomía y para que tengan herramientas para autogestionarse. Estamos comprometidos con sus derechos y con acciones que les permitan sacar adelante sus proyectos de vida y sus iniciativas productivas”, indicó la secretaria de Inclusión Social, Familia y Derechos Humanos, Mónica Alejandra Gómez.
Una de las beneficiarias es Yoleny Oquendo quien hace tres años confecciona mamelucos para bebé antialérgicos y con fragancias frutales.
“Como víctima del conflicto esta es una oportunidad inmensa porque muchas veces nos excluyen de muchas actividades. Este es un gran paso para dar a conocer mi marca, generar ingresos y demostrarles a las víctimas del conflicto que si emprendemos podemos tener logros”, manifestó.
Las personas que acceden a este beneficio deben estar reconocidas dentro del Registro Único de Víctimas (RUV), residir en Medellín y poseer un negocio que lleve por lo menos un año dentro de la ciudad. No se tienen en cuenta iniciativas productivas relacionadas con venta de licor, como discotecas, billares o bares ni las que fomenten la ludopatía (máquinas pagamonedas, juegos de azar o videojuegos para menores de edad).
Para promover el posicionamiento de estas unidades productivas, entre el 15 y el 18 de septiembre, con ocasión del Día del Amor y la Amistad, se realizará una feria en el primer piso de la Alcaldía de Medellín, en la que 18 emprendedores, la mayoría víctimas del conflicto y algunas personas de grupos poblacionales vulnerables, exhibirán sus productos.
Como novedad, cada vendedor contará con un código QR, de manera que las transacciones se puedan hacer sin contacto directo con dinero en efectivo y se implementarán todas las medidas de bioseguridad requeridas.
Estas estrategias de fortalecimiento a las víctimas del conflicto armado también forman parte de las acciones para garantizar sus derechos y reparación integral.
Durante septiembre, Mes por la Paz, esta población es protagonista por sus esfuerzos, resiliencia y enseñanzas en la construcción y consolidación de iniciativas de reconciliación y dignificación.
