Personal de la Secretaría de Seguridad y Convivencia, a través de la Subsecretaría de Espacio Público, tendrá la misión de sensibilizar y entregar los primeros 1.000 kits de bioseguridad, destinados a vendedores informales que laboran a diario en las calles del Centro de Medellín y que han sido previamente identificados como parte del proceso de reactivación económica de la ciudad.
Cada uno contiene alcohol, antibacterial, tapabocas, una pieza gráfica con las normas de bioseguridad y un adhesivo que los identifica como parte de los vendedores comprometidos con los protocolos previstos por la Alcaldía de Medellín.
La iniciativa se extenderá por 15 días hasta lograr que unos 8.000 vendedores informales lo reciban.
Esta actividad lleva un mensaje que refuerza el compromiso de todos los que habitan el espacio público para el cuidado, y bajo la premisa de Todo va a estar bien.
“En esta etapa queremos hacer un llamado a la corresponsabilidad. El cuidado en esta crisis depende ahora de cada uno y es para el bienestar de todos. Sabemos de las dificultades por las que hemos pasado en esta pandemia, pero también que Medellín es una ciudad acostumbrada a reponerse de las peores situaciones sacando lo mejor de cada uno”, dijo el secretario de Seguridad y Convivencia, José Gerardo Acevedo Ossa.
De acuerdo con las cifras de la Subsecretaría de Espacio Público, la ciudad tiene unos 22.500 vendedores informales, muchos de ellos dependientes de esta actividad.
