Con el apoyo psicosocial de la Unidad para las Víctimas, tres comunidades afrodescendientes en El Bagre, Antioquia, avanzan en su plan de Reparación Colectiva.
El Bagre, 14 de Septiembre
Tres comunidades negras de El Bagre, Antioquia, podrán conservar y preservar sus saberes ancestrales, gracias a la elaboración de una cartilla para recuperar su medicina tradicional, acción contenida en el Plan Integral de Reparación Colectiva que implementa la Unidad para Víctimas.
«El significado de esa cartilla para nosotros es la vida misma, porque a través de la medicina tradicional, podemos asistir a una persona que se encuentre en un mal de salud, o que sufra un accidente. Nuestros médicos ancestrales los pueden asistir y esto permite que la persona pueda tener la capacidad para llegar hasta un centro asistencial», aseguró Oiden Julio, representante legal de uno de los tres consejos comunitarios de este territorio.
Luego de recorridos botánicos en su territorio e intercambio de semillas, las comunidades de Chaparrosa, Villagrande y Nueva Esperanza, tendrán la pervivencia de saberes tradicionales en la cartilla, medida concertada en su plan integral de reparación, que servirá para que la sabiduría ancestral no se pierda, pasando de generación en generación.
«Recuperar lo perdido, la ancestralidad que hemos perdido, como las plantas medicinales y las huertas caseras. Estamos aprendiendo a recuperar esto, para que haya un tipo de ingreso, para el sustento de nuestro vivir en estos consejos comunitarios», manifestó, Martha Cuesta, del consejo comunitario Villagrande.
La entidad ha realizado varios encuentros en los que también se les ha dado la participación a los miembros jóvenes de los tres consejos comunitarios. «Es muy importante que los jóvenes también hagamos parte de estas actividades, conozcamos el proceso porque así cuando nuestros mayores ya no estén con nosotros, podamos continuar con nuestras tradiciones y cultura y de igual manera enseñársela a nuestros hijos», anotó, Wendy Julio, de 22 años de edad.
Por su parte Wilson Córdoba, director de la Unidad para las Víctimas en Antioquia, dijo: «Con este plan de reparación colectiva se recupera el tejido social, las prácticas comunitarias y saberes ancestrales que alguna vez se interrumpieron por el conflicto, además de fortalecer la identidad afrocolombiana mediante medidas con enfoque étnico”.
Con la implementación de estas medidas, este sujeto de reparación colectiva alcanza el 64 % de ejecución de su plan de reparación, en el que ya han recibido medidas contempladas como: la recuperación de sus fiestas tradicionales, el fortalecimiento a la guardia ambiental, la dotación a sus escuelas, la construcción de la caseta comunitaria, dotación de mobiliario (sillas y mesas) y kits de cocina con el fin de que puedan reconstruir su tejido social.
También recibieron insumos y máquinas de coser para la implementación de proyectos productivos y la indemnización administrativa de $189 millones, con lo que ha fortalecido su gobierno propio y organizativo, con el fin de completar la ruta de su reparación integral.
