A confeso homicida de Alejandro Sepúlveda le revocaron la prisión domiciliaria y por eso escapó

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Desde el mes de mayo de 2017, Johan Alexis Jiménez Misa, a quien le dicen Misas, purgaba una pena de 15 años de prisión en su casa. Misas reconoció haber asesinado a Alejandro Sepúlveda Quintero , de 25 años. Su abogado defensor pidió a un juez que le concediera la medida de seguridad a su prohijado, pues este había actuado bajo ira e intenso dolor.

La prisión domiciliaria es sustitutiva de la prisión en un penal y consiste en la privación de la libertad en el lugar de residencia o morada del condenado o en el lugar que el juez determine, según lo estipulado en el artículo 22 de la Ley 1709 de 2014.

A la Fiscalía no le gustó esa decisión y la apeló ante el Tribunal Superior de Medellín y este decidió devolverlo a prisión. Pero cuando le fueron a notificar la medida, el pasado 31 de agosto, ya no estaba, había escapado. Por esta razón se libró en su contra orden de captura por fuga de presos.

Como se recordará, Alejandro fue asesinado el 10 de enero de 2017. El hecho ocurrió en un local comercial en el que la víctima mortal celebró su cumpleaños con varios de sus amigos y amigas, entre las que se encontraba la novia de su victimario.

En la madrugada del 10 de enero de 2017, Jiménez Misa le envió un mensaje desde el celular de su novia a Alejandro, haciéndole creer que era ella. Le pidió que la ayudara que la moto se le había varado.
Alejandro fue hasta el lugar de la cita. Allí lo recibió Jiménez, lo encerró bajo amenazas, lo mató y dejó el cadáver bajo llave.

Minutos después del homicidio, un abogado se presentó ante las autoridades indicando que en un local de videojuegos de la calle 34B con carrera 33, barrio Loreto, había un cadáver: el local era de Jiménez Misa y el cuerpo sin vida, el de Alejandro.

Familiares, amigos y allegados a Alejandro piden justicia y a las autoridades la pronta captura de Misas para que cumpla su irrisoria condena.